"Nuestra misión en el Tour es respaldar a Fuglsang"
Astana cuenta con cuatro españoles: Fraile, Luis León, Gorka Izagirre y Pello Bilbao. Empiezan la montaña motivados y con un objetivo claro.
En el Tour de 2019 participan 13 españoles: cinco (Landa, Valverde, Erviti, Verona y Marc Soler) corren para el Movistar (la única escuadra nacional del World Tour) y cuatro con el Astana. Los ciclistas del equipo kazajo, Gorka Izagirre, Pello Bilbao, Omar Fraile y Luis León Sánchez, tienen una misión clara en la carrera: trabajar para Jakob Fuglsang.
Bilbao, vencedor de dos etapas en el pasado Giro, debuta a los 29 años en la prueba francesa: "Lo vivo todo con muchísima intensidad. Me encanta el ambiente, y me encanta estar aquí. Me siento motivado, recuperado de las tres semanas de Italia y con ganas de aportar mi granito de arena para que Jakob acabe lo más arriba en la general". El vizcaíno acaba contrato y Bahrain le tienta para 2020: "Me encuentro centrado en el Tour, así que esas cosas ya se resolverán".
Luis León Sánchez también termina su vínculo con el Astana a final de 2019, como Omar Fraile. A los dos les valoran dentro de la estructura… y fuera. Luisle, murciano de 35 años, ha logrado cuatro triunfos en el Tour a lo largo de su trayectoria deportiva. Fraile (vizcaíno de 28), la única victoria conseguida por un español en la edición de 2018, en Mende, y otra en el Giro. "Aunque ahora aparcaremos las opciones personales para realizar un frente común en favor de Jakob", explican. "Eso sí, si se presenta una oportunidad de brillar sin perjudicar los intereses del Astana, seguro que la apuraremos. En nuestro ocho hay mucho talento", concluye Fraile.
Gorka Izagirre, guipuzcoano de 31 años, es el único de los cuatro que sabe con seguridad que continuará en la formación en 2020. Como Ion, su hermano pequeño. Después de pasar por Euskaltel, Movistar y Bahrain, cumple su primer curso en las filas de Alexander Vinokourov: "Me veo muy bien, adaptado y feliz de competir en el Tour, quizá mi cita favorita, pese a que alcancé mi primer éxito en una grande en el Giro".
El mensaje común del Astana no varía: "Ayudar a Fuglsang en lo necesario para que conquiste el amarillo o suba al cajón de París". Caído en la primera jornada, el danés de 34 años se siente "restablecido de los golpes y cortes, en un gran momento y arropado por la mafia española": "Omar, Gorka, Luis y Pello integran uno de mis grupos de confianza. Con ellos me siento respaldado". Este jueves, primer test de montaña en La Planche.