INEOS se lució en Leeds y Lawless le dio su primer triunfo

El plan de INEOS salió a la perfección en el Tour de Yorkshire. El antiguo Sky presentaba su nuevo nombre en una de las últimas pruebas antes del Giro de Italia, en Reino Unido y quería estrenarse con victoria y baño de masas. Salvo por las protestas ecologistas contra la empresa petroquímica, que fueron una constante durante cuatro etapas, el resto salió según lo planeado. Tuvieron que esperar a Leeds, en la última etapa, para conseguir su primer triunfo, pero Chris Lawless (Wigan, 23 años) acabó ganando la general en un día para enmarcar para el equipo. Mandó en el pelotón, dinamitó la carrera y dos se sus corredores se compincharon con Van Avermaet para repartirse las alegrías. El belga ganó la etapa con Lawless pegado, no le disputó ya que le valía el puesto para ser el quinto ganador distinto (en cinco ediciones) de la prueba.

La prueba tuvo dos partes muy marcadas. Con 175 kilómetros por delante se vieron dos velocidades. Una fuga de nueve, con el español Julen Irizar (Euskadi Murias), se marchó de inico. El Grupo siempre fue controlado por el pelotón y todo se mantuvo sin cambios hasta Greenhow Hill (penúltima ascensión del día). La escapada comenzó a disgregarse y el pelotón, también. En la última, Cote de Otley Chevin, se vio por primera vez a Froome. El británico cambió el ritmo, rompió la carrera y dejó el camino allanado a su compañero, Eddie Dunbar, que estaba a cuatro segundo del liderato y se fue a por la cabeza de carrera. La responsabilidad atrás fue para el CCC de Van Avermaet, que la aceptó. Quedaban 20 kilómetros y todo por decidir.

A falta de 5 kilómetros para el final los ciclistas se encontraron un duro repecho de 800 metros, no era puntuable, pero hizo la escabechina final. Van Avermet atacó y Lawless se fue a su rueda. INEOS tenía dos bazas y las jugó. Pronto se unieron a Dunbar, quien se vació hasta que vieron que cuatro perseguidores llegaban por detrás. El pacto de Lawless fue claro con Van Avermaet. O tiras o nos cazan. Entró a los relevos el belga y la victoria se tenía que jugar entre los tres. El campeón olímpico aceleró en el esprint, Lawless aguantó su rueda, pero sólo buscó asegurar y dejó celebrar al del CCC. Liderato para uno, etapa para el otro y todos contentos. También el público que vibró con el primer triunfo del INEOS, y es que pese a las protestas, los vítores y los ánimos fueron muchos más que las quejas. El antiguo Sky triunfó ante su público.