Guillén: "La Vuelta tiene un cariño especial a Chris Froome"

Javier Guillén, director de la Vuelta a España, espera tener "la mejor participación posible" en la edición en la que 'la Roja', el maillot de líder de este color, cumplirá 10 años, con la inclusión prevista de Alejandro Valverde y Nairo Quintana y las posibles de los británicos Chris Froome y Geraint Thomas, el primero de ellos "especial" para la ronda española.

Guillén acudió en Madrid a la presentación de los nuevos maillots de la Vuelta 2019 diseñados por Santini, los que lucirán los líderes de las diversas clasificaciones y los conmemorativos creados para algunas etapas.

Ante la participación en la 74 edición de la Vuelta, del 24 de agosto al 15 de septiembre, Guillén se mostró optimista, aunque "todavía es pronto para conocer nombres", y espera contar con ciclistas que garanticen, como en ediciones anteriores, la emoción hasta el final.

Guillén ya conoce la intención de correr la Vuelta de nombres importantes como Alejandro Valverde y Nairo Quintana y espera que el Sky incluya en sus filas a alguno de sus líderes, Chris Froome o Geraint Thomas.

"Veremos cómo se desarrollan Giro y Tour. El Sky deberá decidir si Egan Bernal dobla o no con las grandes, pero si Froome y Thomas no hacen el Giro podrían venir a la Vuelta", dijo.

Según comentó Guillén en el acto de presentación de los nuevos maillot de la Vuelta, "si Froome gana el Tour podría venir a la Vuelta".

"Que venga el ganador del Tour siempre es especial. La Vuelta tiene un cariño especial por Chris Froome porque como corredor es el que mas ha apostado por la carrera. Ganó el Tour 2017 y vino aquí. Tenemos predilección por Froome, pero ojalá pudieran venir él y Thomas", indicó.

El director de la Vuelta recalcó "la alegría de poder contar con Alejandro Valverde, lo que representa uno de los mayores honores", un ciclista que "puso a todos de acuerdo en el deseo de que ganara el Mundial".

Preguntado sobre las innovaciones que aportan los organizadores de carreras, Guillén apuntó a la idea de mejorar el espectáculo y para ello recordó que "el Tour es contrario al uso de los potenciómetros" y que en su criterio los "pinganillos" de radio solo tendrían que ser utilizados "para temas de seguridad".

Lo que Guillén considera "innegociable" es la reducción de la Vuelta a menos de tres semanas.

"Los monumentos no hay que limitarlos, sino potenciarlos. Giro, Tour y Vuelta deben ser de tres semanas".

También se refirió Guillén a los aspectos que han cambiado en la Vuelta a España en los últimos años y los que permanecen.

"La Vuelta ha cambiado en personalidad e identidad, todo el mundo sabe lo que se va a encontrar, una prueba con dureza y pasión, emocionante, con finales explosivos, donde se mezcla la tradición y la innovación. Lo que no ha cambiado es el recibimiento a la Vuelta allá por donde pasa, incluso a lugares que representan a la España vaciada. Llegamos donde no llegan otros eventos", subrayó.