El apellido Cabedo brilló en la Vuelta para el Burgos BH
Óscar, de 23 años acabó séptimo en la Alfaguara. Cruzó la meta llorando mientras recordaba a su hermano Víctor, que falleció atropellado en 2012.
Para el Burgos-BH, equipo que disputa su primera Vuelta como invitado, la actuación de Óscar Cabedo en la etapa de este martes con final en La Alfaguara significó mucho. Llegó séptimo, el mejor puesto de momento para los de Julio Izquierdo, después de formar parte de la fuga que protagonizó la jornada y que acabó con la victoria de Ben King. Óscar se mantuvo con opciones hasta la última subida, y aunque no había logrado estar delante en los últimos kilómetros, que el maillot del equipo se hubiese visto en cabeza durante toda la etapa fue motivo para que en meta le llovieran las felicitaciones.
Pero además de las razones deportivas, hubo otras mucho más personales que hicieron que Óscar llegara a la cima visiblemente emocionado. Durante todo el día había tenido muy presente la figura de su hermano mayor, Víctor, ciclista que llegó a militar en profesionales en las filas del Euskaltel-Euskadi y que murió en 2012 arrollado por un coche durante un entrenamiento. Tenía 23 años, la misma edad con la que ahora Óscar se encuentra debutando en una Vuelta que significa la gran cita de su carrera deportiva. “Es como si estuviera viviendo el sueño de mi hermano, fue una jornada llena de emociones y en la que el esfuerzo y los sentimientos se mezclaron”, relató luego.
Y como él, su hermano José, director del equipo, y la familia, que regenta una tienda de bicicletas en Onda, vivieron una jornada muy emotiva. Este martes todos se sintieron orgullosos de que un Cabedo fuera protagonista en la Vuelta a España.