Froome: "Lo único que quiero ahora es un proceso justo"
El británico, investigado por su positivo con salbutamol, atendió a los medios antes de la salida de la primera etapa de la Vuelta a Andalucía, en Mijas.
Aficionados y medios de comunicación se agolparon en el bus del Sky en la salida de la primera etapa de la Ruta del Sol, en Mijas. Chris Froome, cuatro veces ganador del Tour, regresaba a la competición. Sin embargo, las preguntas giraron en torno a la investigación por su positivo con salbutamol en la Vuelta a España de 2017: “Puedo participar aquí, las reglas lo permiten. Soy el primero que pretende que esta situación termine lo más rápido. Nos encontramos en pleno estudio, y en este punto debo demostrar que no hice nada fuera de la normativa. Nunca me salté el reglamento”.
Pese a que David Lappartient, presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI), solicitó al Sky que el británico no corriera hasta que se resolviera su expediente, Froome explicó su versión a los periodistas: “Mi caso se llevaba de manera confidencial, como el de otros corredores, pero se convirtió en público debido a una filtración. Sólo pido que se realice un proceso justo, no un beneficio de la duda a mi favor. Me he entrenado y ahora comienzo las carreras porque no me lo impide nada. La Fundación Antidopaje de la UCI decidirá tras escuchar mis argumentos”.
Froome dobló la tasa fijada para el salbutamol. La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) estipula 1.000 nanogramos por mililitro. Su orina registró 2.000. Aunque disponga de una autorización médica y no sobrepasara el tope de 1.600 microgramos por inhalación, se expone a un castigo de dos a cuatro años: “No pienso en qué sucederá. O si perderé la Vuelta y las cosas que logre ahora. Simplemente me centro en mis planes para 2018. En este programa incluyo el Giro y el Tour”. Mientras firmaba en el control, un espectador le lanzó un reproche: “¡Dale un chute al Ventolín, Froome!”. Él cree que le apoyan tanto el pelotón como su equipo: “Me han tendido la mano y en Sky confían en mi inocencia”. No en vano no le han apartado, al contrario que le ocurrió a Sergio Henao con sus valores irregulares.
También intentó marcar diferencias con Alberto Contador y su positivo por clembuterol en el Tour de 2010: “Su análisis registró un producto prohibido, el mío no lo es”. Sí lo es (por eso le investiga la UCI), pero se trata de una sustancia específica sin suspensión cautelar. Por eso no ha vetado nadie su presencia en la Ruta del Sol. “Existe mucha desinformación en mi proceso, esclarecemos el asunto y llegaremos hasta el final”, concluyó antes de calentar en el rodillo y de que su guardaespaldas le escoltara hasta la salida. Saludó a organizadores, políticos y otros compañeros de profesión, como Landa o Fuglsang. Como si no pasara nada.