Froome vuelve a competir con su futuro todavía en el aire
El británico, positivo en la Vuelta de 2017, regresa en la Ruta del Sol con su proceso por dopaje aún abierto. Mikel Landa debuta con el Movistar.
El Sky se presentaba en 2010 como estandarte del nuevo ciclismo, con tolerancia cero con el dopaje. En 2018 se encuentra inmerso en plena crisis de credibilidad por el positivo de Chris Froome en la Vuelta de 2017. Antes vivieron situaciones delicadas, como una investigación a Bradley Wiggins o los despidos de un doctor sancionado, Geert Leinders, y de un corredor con pasaporte anómalo, Tiernan-Locke. Por valores irregulares, Sergio Henao fue excluido por el equipo hasta que se aclarara su caso. Ni explicaron detalles, ni le castigó la UCI. Sin embargo, el Sky no ha tomado ninguna medida con Froome: desde este miércoles le alineará en la Ruta del Sol, pese a su proceso abierto.
Según pudieron saber La Gazzetta dello Sport y As, la Fundación Antidopaje de la Unión Ciclista Internacional (UCI) estudiará sus alegaciones a lo largo de esta semana y de la próxima. Con la defensa en marcha, Froome acapara los focos, pero supone un problema para la organización: si le suspenden, se eliminarán sus resultados. Como ocurrió con Alberto Contador en 2011. Las normas le permiten competir, ya que su positivo con salbutamol, una sustancia específica, no conlleva cautelar. “Nada ni nadie impiden que esté aquí. Su presencia supone un honor para nosotros”, sentencia Joaquín Cuevas, director de la ronda.
Así que Froome partirá como uno de los favoritos, como en cada carrera en la que se inscribe. “Hago lo máximo para asegurarme de que las cosas se resuelvan con celeridad. Deseo arrancar la campaña”, tuiteó el vencedor de la Ruta del Sol en 2015. Escoltado por su guardaespaldas, no habló para los medios en el Holiday World de Benalmádena. El Sky rechazó las peticiones de entrevistas y cierra filas alrededor de su líder. “En este momento respaldamos totalmente a Chris”, asegura su mánager, David Brailsford. Los técnicos del pelotón en Andalucía coinciden en su opinión: “No rompe ninguna regla, aunque se debata sobre la ética. Si corre, quizá sepa que no recibirá ninguna sanción. Si no, que le quiten los títulos se convertirá en su problema”.
Mikel Landa debutará con el maillot del Movistar y se enfrentará por primera vez en 2018 a su excompañero: “Cumple todos los requisitos para participar, así que bienvenido. Me apetece el reto de medirme con él. Me siento bien y con ganas de empezar”. Otra nueva temporada… pero las dudas no dejan de planear sobre el ciclismo.