Superman López: "Conocía el final y he esperado para atacar”
El corredor colombiano se impuso en la undécima etapa de la Vuelta gracias a un cambio de ritmo a falta de un kilómetro para coronar Calar Alto.
La entrada del colombiano Miguel Ángel López a la meta de Calar Alto fue como la de un superhéroe. Simplemente se santiguó al cruzar la línea y llegó a donde estaban sus asistentes con rostro impasible, quizá también helado por las bajas temperaturas de la cima almeriense. Estos se apresuraron a abrigarle, luego llegaron las felicitaciones y los abrazos por su victoria. “Fue un día muy duro y complicado, pero conocía el final y sabía que tenía que atacar en el último kilómetro para tener opciones”, explicó luego. Le salió bien. Ni Froome ni Nibali pudieron coger su rueda.
Pero a este joven colombiano de 23 años, el mote de Superman no le viene por sus exhibiciones en la montaña ni por esos números en los entrenamientos que empezaron a llamar la atención cuando empezó a batir los registrados por Nairo Quintana (“no me motiva superarle, él en sí es una motivación para Colombia”). Le llegó por un hecho mucho más desagradable, cuando hace seis años en un entrenamiento por Sogamoso, en los alrededores de Bogotá, dos ladrones intentaron robar la bicicleta al menudo escalador, que no la soltó a pesar de recibir varias puñaladas. Un comentarista le bautizó con el sobrenombre que le está acompañando en toda su carrera.
Una trayectoria meteórica desde joven (ganador de la Vuelta a la Juventud y el Porvenir, algo así como la Vuelta a Colombia y el Tour Sub-23), que ha continuado ya como profesional, con triunfos de categoría como la Vuelta a Suiza. Progresión de superestrella que sólo han cortado las continuas caídas, como la que le hizo retirarse en la pasada Vuelta, su estreno en una grande (esta es la segunda): “Cuando uno quiere ser ciclista sabe que eso pasa. Cuando preparaba esta temporada fui atropellado por un coche y llegué aquí con pocos días de competición. La primera semana me noté falto de ritmo, sólo corrí Austria y Burgos antes de venir”. Dos carreras donde demostró que estaba afinando de maravilla para esta Vuelta ya que logró etapa en cada una, las dos victorias que había logrado este año hasta ayer.
Aru y él
Pero su gran actuación en la primera gran cima, 1:32 mejor que su líder Aru, no le hace aún jefe del equipo. “Yo estoy aquí para ayudarle. Fabio es un gran corredor, con mucha más experiencia que yo y él sigue siendo el jefe. Me sentí con buenas piernas y el equipo decidió que me quedase delante para luchar por la etapa. Salió bien y soy muy feliz”.