Quejas del pelotón: “El Tour tiene la carrera que quería”
Algunos corredores claman por las caídas de la etapa reina antes de la segunda semana de competición: "Fue un mensaje para la organización".
Daniel Martin, habitualmente tranquilo y comedido en sus declaraciones, cargó contra el Tour por la etapa reina del domingo: “La organización tiene la carrera que quería”. El irlandés se refería a las bajas por lesión de Geraint Thomas, con la clavícula derecha rota; de Richie Porte, con fracturas de clavícula y pelvis y traumatismo craneal; y de Rafal Majka, sin huesos rotos, pero hecho polvo por los fortísimos golpes. “Incluir unos descensos peligrosos conlleva estas situaciones”, continuó Martin, al que tiró involuntariamente Porte en su caída.
Nairo Quintana y Eusebio Unzué, mánager general del Movistar, se expresaron en una línea similar: “Pasamos miedo con esas bajadas tan peligrosas. Lo de Porte, Thomas y los demás implicados debería convertirse en un mensaje para que los organizadores piensen más en el ciclista. Pretenden dar espectáculo antes que preocuparse por los protagonistas. Así puede suceder cualquier desgracia”. El colombiano dijo que se salvó en el accidente de Thomas “de milagro”: “Volé”.
Contador, afectado por dos percances, no culpó a ASO por el trazado: “Completamos un día igual en el Dauphiné. Sabíamos a lo que nos enfrentábamos. Los recorridos los hacemos los ciclistas más o menos rápidos y complicados”. El madrileño sí deslizó que su segunda caída la provocó Nairo: “No sé exactamente por qué, pero chocó contra mí con violencia y me tiró”. El Movistar se justificó: “Sólo se produjo un enganchón”. Jesús Herrada, el otro español que se fue al suelo, recibió cuatro puntos en su rodilla derecha y saldrá este martes.
Chris Froome, sólido líder de la ronda, perdió a uno de sus hombres de confianza, Thomas: “Le echaré de menos. El Tour vio irse en una tarde a Geraint Thomas, a Porte y a Majka. Disputamos una jornada brutal, terrorífica”. En sus palabras no había crítica, sino la constatación de lo dura que resultó la considerada etapa reina: “Eliminó a algunos adversarios por lesión y a otros por la exigencia de las subidas y las bajadas. Afortunadamente, conservé el maillot amarillo”.
De cara a la segunda semana, Froome (que no ofreció rueda de prensa en el día de reposo) afrontará los Pirineos con 18 segundos de ventaja sobre Aru, 51 a Bardet y 55 a Urán. Su escudero Landa se encuentra noveno. Nairo se aleja a 2:13 y Contador, a 5:15: “Dispongo de un equipo que me respalda en todo momento. Contamos con las piernas, la experiencia y una crono favorable, aunque falta mucho Tour y me atacarán”. No les queda otra a sus rivales.