De Marchi gana entre la niebla y Dumoulin cede poco terreno
El italiano, ganador el año pasado en Alcaudete, remató la escapada. Fabio Aru sigue líder, pero el holandés no perdió mucho tiempo y está a 49" del maillot rojo.
Alessandro De Marchi, ganador el año pasado en Alcaudete, volvió a alzar los brazos en la Vuelta a España al rematar en la Fuente del Chivo la escapada de cinco corredores. José Joaquín Rojas repitió sus habituales posiciones: tercero. Entre los gallos, un recuperado Nairo Quintana fue el mejor, aunque sólo arañó 6 segundos a Purito Rodríguez; 7" a Esteban Chaves y Fabio Aru, y 12" a Rafal Majka. Tom Dumoulin no llegó con el grupo de escaladores, pero mantuvo el tipo, únicamente cedió 19 segundos respecto al maillot rojo y mantiene intactas sus opciones de ganar la carrera a 49" del líder.
La perspectiva de tres llegadas en alto consecutivas, con el etapón del lunes como remate en la Ermita de Alba, frenó el ímpetu de los equipos con intereses en la clasificación general. La escapada del día tardó en formarse, pero finalmente tuvo el permiso del pelotón en el km 55, aunque con ello volaran también las bonificaciones de la meta. El quinteto lo integraron los insistentes De Marchi, Rojas y Carlos Quintero, además de Mikael Cherel y Salvatore Puccio.
A esas alturas ya se había retirado Samuel Sánchez, torturado por la infección en un dedo gordo del pie. También Thomas de Gendt, que desde que subió al podio del Giro de 2012 no ha vuelto a estar por ahí arriba. Después se uniría al listado otro español, Lluís Mas, que no ha podido repetir sus prestaciones del año pasado en la Vuelta con el Caja Rural.
La escapada abrió hueco sin oposición y comenzó la ascensión final con más de nueve minutos de ventaja. La etapa era suya, por mucho que Ángel Madrazo intentara una arrancada sin futuro en sus rampas iniciales, animado por correr en su tierra cántabra. Los cinco fugados ya estaban muy lejos, inalcanzables para discutirles la victoria. Cherel lanzó la primera andanada. Luego lo intentó Rojas, pero De Marchi y Puccio le rebasaron. Finalmente se cumplió el pronóstico y venció el corredor del BMC, nombrado el año pasado el más combativo del Tour. De Marchi no se había estrenado todavía esta temporada.
Por detrás, Fabio Aru arrancó a un kilómetro y medio con la intención de seguir arañando tiempo a sus rivales. Sólo Nairo Quintana resistió su zarpazo, que finalmente no fue tan fiero. Purito, Chaves, Majka y Domenico Pozzovivo también llegaron a su altura. Las diferencias entre los escaladores fueron mínimas, pero había que pulsar el cronómetro para calcular cuánto tiempo cedería el neerlandés, que subió a su ritmo, sin cebarse nunca con el ritmo de ciclistas más explosivos y livianos. Dumoulin tan sólo perdió 19 segundos con Aru y 20" con Purito, los dos corredores que le preceden. Con estos tiempos y con la contrarreloj de Burgos por disputarse, se puede afirmar que, a día de hoy, es el virtual ganador de la Vuelta.
El tríptico cántabro-asturiano disputa este domingo su segundo asalto entre Comillas y Sotres, un final de etapa en el corazón de los Picos de Europa que concentra su dureza en el último tramo. Sin puertos previos de categoría, no parece una jornada para arañar mucho tiempo. Los cartuchos más letales de los escaladores tendrán que prenderse el lunes camino de la Ermita de Alba.