112ª edición de la ‘París-Roubaix’
Boonen y Cancellara luchan contra el adoquín y la historia
Si gana Boonen sumaría su quinto triunfo, desempataría con De Vlaeminck y se convertiría en el más laureado. Si lo hace Cancellara empataría a cuatro victorias con los dos belgas.
Tom Boonen y Fabian Cancellara son mitos rodantes. Una mítica que han cincelado en los adoquines del Tour de Flandes y la París-Roubaix. Hoy es el turno del Infierno del Norte. Y ahí, sobre los 51,1 kilómetros de pavés repartidos en 28 sectores, el belga y el suizo pelean contra algo más grande que el resto que rivales... Pelean contra la historia. Si hoy gana Boonen sumaría su quinto triunfo, desempataría con Roger ‘el Gitano’ De Vlaeminck y se convertiría en el más laureado de siempre. Si lo hace Espartaco Cancellara empataría a cuatro victorias con los dos belgas. De leyenda.
Cancellara llega mejor a priori. Viene de ganar en Flandes y ya ha logrado el doblete dos veces (2010 y 2013). “No soy el número uno. Hay muchos favoritos, son ellos quienes deben cargar con la presión”, dice el suizo. A Boonen se le ha visto menos esta primavera, aunque ha ganado la Kuurne-Bruselas-Kuurne. Pero Espartaco advierte: “Boonen está listo, más de lo que la gente piensa”.
El belga cuenta también con un equipazo, el Omega Pharma, donde militan otros candidatos: sobre todo Stybar, pero también Terpstra o Vandenbergh. Bazas estratégicas para desquiciar a Cancellara. Junto a ellos, más favoritos: Vanmarcke, Van Avermaet, Sagan, Kristoff, Degenkolb... Y una ilustre incógnita: Bradley Wiggins, que se ha apuntado a los adoquines con un discurso de veneración a la prueba: “Es la carrera más grande del mundo, más que el Tour de Francia”.