Valverde ya es aspirante en el Tour

El Dauphiné Liberé es una prueba de fuego para todos los corredores que aspiran a ganar en julio el Tour de Francia. Yo conozco esta carrera de mi etapa como ciclista y director y puedo decir que es la segunda más dura del mundo, tras el Tour. Tiene jornadas alpinas, etapa cronometrada y además se ahorran los días de llegada al sprint para concentrar toda la exigencia en una semana. Los grandes campeones de distintas épocas, desde Anquetil, Merckx y Thevenet hasta Indurain y Armstrong, pasaron por aquí antes de conquistar París. Dicho esto, creo que Alejandro Valverde está capacitado para coronarse como nuevo campeón del Delfinato y presentar su candidatura a la Grande Boucle. Alejandro no ha tenido problemas para superar las dos primeras etapas de los Alpes. Ayer estuvo con los mejores en el Joux Plane, un puerto durísimo, e incluso picó algunos segundos a sus rivales más directos. Hoy debería hacer lo mismo en la Croix de Fer y La Toussuire. Cuenta con grandes rivales como Leipheimer y Cadel Evans, pero pienso que va a aguantar el amarillo. Podemos confiar en él para julio, ya que se encuentra en plena madurez y le sobra calidad.

Respecto a la rueda de prensa conjunta que dieron ayer los organizadores del Tour y la Vuelta, debo decir que me parece una grandísima noticia para nuestro ciclismo. La participación de ASO es muy importante, lo que garantiza un fuerte impulso y una revitalización considerable para nuestra carrera. Creo que nos ha tocado la lotería con esta feliz noticia.