Una década, diez momentos: Doncic cumple diez años en el baloncesto de élite
El niño que maravilló a todos en el Real Madrid es hoy uno de los mejores jugadores del mundo. Diez años después de su debut, Doncic cuenta con todo un repertorio de momentos inolvidables.
Han pasado diez años desde que un joven esloveno al que se le quedaban pequeñas las categorías inferiores debutó en la Liga ACB. Aunque parezca mentira, la 2025-26 será la décima temporada como profesional para Luka Doncic. También será el inicio de su octava campaña en la NBA, y su segunda con Los Angeles Lakers, vistiendo de amarillo y púrpura desde Octubre por primera vez en su carrera.
Luka Doncic es un jugador diferente. Uno que, independientemente de los títulos que haya ganado al final de su camino, será recordado por su forma única de trasladar un talento inigualable a una pista de baloncesto. En prácticamente cada partido deja alguna jugada memorable. A pesar de ser todavía joven, no son pocas las ocasiones en las que sus logros y acciones han trascendido para pasar a la historia del baloncesto. Con tan sólo 26 años, Luka Doncic ya ha construido una gran montaña de momentos icónicos.
El debut con el Real Madrid
El 30 de abril de 2015, en los últimos minutos de un partido sentenciado ante el Unicaja, Pablo Laso dio la oportunidad a un jovencísimo Luka Doncic de debutar como profesional. Tras haber pasado por categorías inferiores del club desde 2012 y haber demostrado una superioridad impresionante en el juego, el salto a la élite era algo inevitable. El esloveno, que ya venía entrenando con el primer equipo, entró a la pista con una seguridad impropia de un niño de 16 años. En la siguiente jugada se demostró algo que parecía estar escrito desde el principio: es un jugador especial. No dudó en lanzar el primer balón que tocó en su carrera. Un triple que acabó dentro, y un momento que ya ha pasado a historia de la Liga Endesa.
El oro continental con Eslovenia
En una gesta heroica, Eslovenia se proclamó campeona del Eurobasket 2017. Si bien es cierto que el líder de esa selección fue Goran Dragic, que en ese momento jugaba en Miami Heat, Luka Doncic fue la segunda espada, uno de los pilares fundamentales de su selección a pesar de tener sólo 18 años. Cayó lesionado en la segunda parte de la final ante Serbia, pero Eslovenia no habría podido llegar a ese momento sin él. Con 14 puntos y 8 rebotes de promedio y una actuación histórica en cuartos de final ante Letonia (27 puntos y 8 rebotes), un joven Doncic se consolidó en este torneo como uno de los grandes talentos de presente y futuro en el baloncesto y dejó destellos de lo que estaba por venir en su carrera.
El cierre de ciclo perfecto
Doncic finalizó su etapa en el Real Madrid de la mejor manera posible. Un año inmaculado que el esloveno remató con su primer título de Euroliga. Su mejor partido esa campaña fue contra El Olimpia Milano en la jornada 3, donde anotó 27 puntos, capturó 8 rebotes y repartió 5 asistencias para finalizar el partido con 41 de valoración, siendo el líder absoluto de los blancos en una difícil victoria (100-91). Con 16 puntos y 21 de valoración por partido, Doncic cerró una campaña europea incontestable proclamándose el MVP de la Final Four de la Euroliga más joven de la historia. Con tan sólo 19 años Luka Doncic ya había ganado todo lo que se podía ganar en este continente.
El inicio del sueño americano
El último año de Luka Doncic en el Real Madrid fue, verdaderamente, un año perfecto. El genio esloveno no sólo fue campeón y MVP de la Euroliga, sino que también ganó la Liga Endesa y se proclamó MVP de dicha competición, convirtiéndose en el jugador más joven de la historia en hacerlo. El salto a la NBA era tan obvio como inevitable, pues con 19 años el esloveno ya era el mejor jugador de Europa. Varias dudas respecto a su defensa y falta de capacidad atlética lo acabaron enviando al número 3 del Draft de 2018, a pesar de haber llegado a Estados Unidos como el mejor y más laureado jugador de su clase. Fue elegido por Atlanta Hawks, pero traspasado esa misma noche por el pick número 5, Trae Young. Doncic acabó la noche como jugador de Dallas Mavericks, en la que fue su casa durante muchos años, y donde se convirtió en una superestrella mundial.
El debut olímpico soñado
El 26 de julio de 2021 fue un día histórico en la carrera de Luka Doncic. Jugó su primer partido en unos Juegos Olímpicos (Tokio 2020), y anotó la friolera de 48 puntos ante Argentina (118-100), con lo que logró la segunda marca más alta de la historia de la competición, muy cerca del récord del brasileño Oscar Schmidt (55 puntos ante España en 1988). En el torneo, Luka y los eslovenos se quedaron a un solo punto de una aparición en la final olímpica: 90-89 en semifinales contra Francia. Sin embargo, en su siguiente encuentro contra los franceses, en el Eurobasket 2022, Doncic anotó 47 puntos de los 88 de su equipo en una apretada victoria (82-88), y sumó otra actuación de videojuego en un partido que ya pertenece a la historia del baloncesto internacional.
El game winner más icónico de la burbuja
La burbuja fue uno de los eventos más inusuales que se han vivido en la historia del baloncesto. La ausencia del público en los pabellones hizo que los partidos parecieran entrenamientos de exhibición. La diferencia es que el anillo de la NBA estaba en juego. En su primera serie de playoffs, cuando los Clippers lideraban por 2-1, Luka Doncic nos dejó un tiro para el recuerdo. En la prórroga del cuarto partido, a falta de cuatro segundos y un punto por debajo en el marcador, los Mavericks sacaban de banda. Luka recibió el balón, bailó ante Reggie Jackson con dos cambios de mano, realizó su característico step back y anotó un triplazo para ganar el partido. Sobre la bocina. El primer game winner legendario para el genio esloveno en la mejor liga del mundo.
La mejor noche estadística de su carrera
Hay días en los que todo sale bien. De alguna forma inexplicable, ocurre algo prácticamente inverosímil; algo que se recuerda para siempre como una hazaña imposible, pero que ocurrió. Algo similar a esto pasó en la que parecía una noche más de finales de diciembre de 2022, con Luka Doncic como protagonista. Una noche perfecta ante los Knicks. Fue la primera vez que anotó 60 puntos, pero eso no fue lo más importante. Nunca antes se había conseguido un triple doble 60-20-10. Luka ‘Magic’ lo hizo realidad. 60 puntos, 21 rebotes y 10 asistencias para sumar la que puede ser la mejor línea estadística de la historia. Los Mavericks perdían de 9 faltando 44 segundos, pero de alguna forma se colocaron a dos, y a falta de dos segundos, Doncic falló su tiro libre a propósito, capturó su rebote y empató el partido con una canasta en el aire mientras se caía al suelo. Los Mavs no tuvieron rival en la prórroga. Esa noche será recordada como la noche en la que Doncic hizo posible lo imposible.
La legendaria noche de los 73 puntos
Algunos jugadores tienen una facilidad especial para anotar puntos. Es algo extraordinario, lo hacen tan fácil que parece que cualquiera podría hacer lo mismo, pero en realidad son unos elegidos. Doncic es uno de ellos, un jugador con un talento inconmensurable y una facilidad ridícula para meter puntos. No es casualidad que fuera el máximo anotador de la NBA en la temporada 2023-24, con un promedio de 33,9 puntos por partido, el más joven en lograr ese hito desde Kevin Durant en la temporada 2011-12. Pero a pesar de anotar alrededor de 35 puntos cada noche, hubo una algo más especial que las demás. El 27 de enero de 2024, Luka Doncic consiguió la mayor marca personal de su carrera. 73 puntos ante Los Atlanta Hawks, en una hazaña que recordó al mundo quién es el mejor anotador del planeta.
El último gran baile vestido de azul y blanco
Doncic se ganó el corazón de Dallas tan pronto como pisó la pista vistiendo los colores de los Mavs. Ganó el Rookie del Año en 2019 y demostró al mundo que había llegado a la élite y que su progresión difícilmente tendría techo. En 2022 llevó a los Mavs a sus primeras finales de Conferencia, donde cayó ante unos Warriors que terminarían siendo campeones ese año. Su techo en la franquicia llegó en los playoffs de 2024, con Kyrie Irving como escudero. Tras haber vencido 4-2 ante los Clippers y los Thunder, los Mavericks se enfrentaron a los Minnesota Timberwolves en la final de Conferencia. Con un promedio de 32,4 puntos, 9,6 rebotes y 8,2 asistencias, además de un triple decisivo ante Gobert en el segundo partido, Doncic se comió al lobo. Un 4-1 contundente con el que el esloveno consiguió el MVP de la final de Conferencia y un pase a sus primeras Finales de la NBA.
La llegada a los Angeles Lakers
El 2 de febrero de 2025 ocurrió algo que dejó en shock al mundo del baloncesto. Luka Doncic, uno de los mejores jugadores del planeta en ese momento, fue traspasado a los Lakers, a cambio de Anthony Davis y a dos meses y medio del inicio de los playoffs. Fue algo que nadie entendió, y que sirvió como una llamada de alarma a todas las superestrellas de la NBA que parecían intocables. Luka llegó a Los Ángeles e hizo que LeBron James, por primera vez en su carrera, no fuera la primera opción ofensiva de su equipo. En su vuelta a Dallas, tras un tributo emocionante realizado por la que fue su casa durante seis temporadas y media, Doncic trasladó todas sus emociones a la pista. 45 puntos acompañados de 7 triples para un partido donde fue más coreado por el público que los propios jugadores de los Mavericks. No sabemos dónde está su techo en Los Lakers, pero sin duda, tiene todas las cualidades para escribir un nuevo capítulo en la historia de la franquicia más laureada de la NBA.
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