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NBA | NETS 99 - BULLS 108

La vida sigue igual: ridículo de Kyrie en los primeros Nets pos-Nash

Unas horas después del de la salida de Nash, los Nets caen en Brooklyn con un partido nefasto de Kyrie y un LaVine titánico en el cuarto decisivo.

Unas horas después del de la salida de Nash, los Nets caen en Brooklyn con un partido nefasto de Kyrie y un Lavine titánico en el último cuarto.
Unas horas después del de la salida de Nash, los Nets caen en Brooklyn con un partido nefasto de Kyrie y un Lavine titánico en el último cuarto.Dustin SatloffAFP

El desastre continúa. Tan solo unas horas después del despido de Steve Nash, los Nets vuelven a perder ante su público, en Brooklyn, en un muy mal partido. Jacque Vaughn, entrenador al que en su día sustituyó Nash y que se quedó como asistente de la franquicia, se ha hecho cargo de la plantilla a la espera de que llege un nuevo técnico, que todo apunta a que será Ime Udoka. Para redondear la locura de los Nets, que quieren contratar a un jugador que ha llenado las páginas de los periódicos de polémica tras una tumultuosa relación con una trabajadora de los Celtics y el castigo de los verdes de un año sin entrenar al equipo, una decisión extraña de la que se librarían en caso de que Udoka saliera rumbo a los Nets. Parece que en Boston se frotan las manos con la situación. Y que los Nets, incomprensiblemente, añaden más locura y polémica a la franquicia.

La llegada de Udoka, si finalmente se da, se produciría apenas unos días después de que Joe Tsai, dueño de la franquicia, criticar a Kyrie Irving por su recomendación antisemita. Algo contradictorio para un jugador extraordinariamente polémico y que lleva mucho tiempo siendo más importante en lo extradeportivo que en lo deportivo. A él le añades a Udoka, del que se dijo que “no volvería a entrenar en la NBA, tras llevar a los Celtics a las Finales y ser protagonista por una situación de la que no terminamos de saber toda la información. Y encima, llega a los Nets porque la franquicia, según se ha filtrado, ha valorado el caso y ha llegado a la conclusión de que... el equipo puede ser un top defensivo de la Liga. Vivir para ver. La situación ya es surrealista y moralmente reprobable más allá de que los Nets, de hecho, no tienen jugadores para defender. En fin.

De una forma u otra, las derrotas siguen subiendo en el casillero del equipo de Brooklyn: 2-6 ya, antepenúltimos de la Conferencia Este, sin sistema, sin defensa y, en esta ocasión, también sin Kyrie, que toca fondo también en lo deportivo. El base se fue a casa con un partido para el olvido, en el que se fue a apenas 4 puntos, 6 rebotes, 7 asistencias, 3 pérdidas, un pírrico 2 de 12 en tiros de campo, 0 de 6 en triples y ningún intento desde la línea de personal por primera vez esta temporada, y primera también desde el pasado 2 de abril. Al final, un -14 con él en pista y una apatía que no ha redondeado con ningún tipo de esfuerzo defensivo. En teoría, un bache para un jugador que está teniiendo grandes números esta temporada (ahora algo menos de 30 puntos de promedio), pero que no se puede permitir actuaciones tan malas en pista, lugar en el que tiene que compensar su inexplicable personalidad.

Los protagonistas, con Kyrie jugando como jugó, fueron Kevin Durant y Zach LaVine. El primero anotó 14 de los últimos 16 puntos de los Nets en el primer cuarto, cifra con la que acabó dicho periodo, y se fue a 32 tantos, 9 rebotes y 6 asistencias, aunque 7 pérdidas. Pero el héroe fue LaVine: empezó anotando y asistiendo en 12 de los primeros 15 puntos de su equipo y se fue a 29 al final... con 20 en el último cuarto. Ahí fue donde los Nets, que mandaban 80-77 antes de afrontar los últimos 12 minutos, perdieron el partido. El parcial fue de 19-31 para los Bulls, comandados por un LaVine que acertó en 6 de sus 10 tiros de campo e hizo 4 de 6 en triples, con 4 de 4 en el tiro libre. Una pena para unos Nets que fueron por delante durante más tiempo (58-52 al descanso, 99-108 al final) y que necesitaban la victoria para templar un poco las tumultuosas aguas por las que navegan, pero que se quedaron sin premio y encima, con Kyrie señalado.

Ahora, a remar. A los Nets no les queda otra: la salida de Nash deja sin uno de sus bastiones a Durant y Kyrie, que quisieron al enytrenador en su día, y el equipo tendrá que paliar su falta de juego interior, exterior, su profundidad de banquillo y, sobre todo, su falta de sistema. Hoy fueron superados en la zona por Nikola Vucevic (7 tantos, pero 15 rebotes), y fueron víctimas de buenos minutos de DeMar DeRozan (20 puntos), Patrick Williams (12), Ayo Dosunmu (17) o su ex, Goran Dragic (15). Pero, más allá de eso, fueron superados por ellos mismos. Bien Royce O’Neale (20 puntos con 8 de 12 en tiros), bien Nic Claxton (10+10, el único que defiende un poco), pero mal en líneas generales y con poca materia prima para sostener una ventaja que podrían haber gestionado en otras circunstancias y siendo un equipo, claro, totalmente distinto. Y, por si fuera poco, Ben Simmons no jugó por segunda noche consecutiva. Hay tormenta en los Nets. Y la solución no parece sencilla. Veremos.