El reto del Bilbao: ganar en el Palau para seguir mirando al playoff

El Bilbao Basket está muy vivo en la pelea por el playoff. La octava plaza no tiene dueño y es uno de los candidatos que pelean por ella. Las cuentas son claras: ahora mismo está en manos de un Gran Canaria (17 victorias) que viaja a la pista del Betis y recibe al Real Madrid en el fin de curso. Los insulares pierden el average con Bilbao y también con el Murcia, en este caso los dos partidos, un apunte que resulta clave si hay triple empate. Noveno es el Murcia, con 16 victorias y el average ganado con el Bilbao Basket. Le queda visitar al Madrid y recibir al Zaragoza. Y a los bilbaínos (16) les resta jugar mañana en el Palau y acabar en Miribilla ante el Betis. Deben ganar un partido más que los insulares y los pimentoneros. O les valdría con empatar a 17 con el Breo y otro. Todo muy abierto.

Mumbrú ha hecho un ejercicio de abstracción con toda esa matemática, aunque seguro que internamente lo tiene más que controlado. “No estamos pensando mucho en números y resultados sino en nosotros mismos, en hacer un buen partido en Barcelona, con la ilusión de competir y veremos qué resultado sale”, expone el entrenador del Bilbao Basket. El Barça es líder de forma matemática y llega tras el susto gordo del Pazo el sábado. “No se juegan nada porque son primeros matemáticamente; tienen a la vuelta de la esquina la Final Four de la Euroliga y el inicio del playoff, seguro que no es el partido que más les gusta por calendario o porque no hay nada en juego. Vienen de sufrir en Lugo y querrán acabar con buenas sensaciones la fase regular”, prosigue.

No depende de sí mismo el Bilbao Basket, pero da la sensación de que si se impone en los dos partidos que restan, regresará al playoff tras un año de ausencia. "Hablamos de algo complicado como es jugar en el campo del Barça, tienes que hacer un partido redondo y que a ellos no les salga uno muy bueno, pero vamos con la ilusión de competir”, resume Mumbrú, quien tiene claro que no van a perder la cara a todo un líder: “En casa solo ante Zaragoza o Joventut no hemos competido, en los otros, siempre, en casa y fuera. Ojalá podamos llegar a un final ajustado contra el Barça, pero es complicado. Hay que ser competitivos hasta el final porque estamos a una semana de acabar la Liga si no entramos en el playoff. Que quizá hasta el último partido estés jugándote el playoff es bonito, poder competir por algo".

El Bilbao Basket no descuida el futuro y ya se ha dirigido a Mumbrú para renovar: “Oferta no tengo, sí hemos podido hablar de que nos gustaría seguir los caminos, tanto yo como el club, hay conversaciones, una cosa es hablar y otra que haya oferta. Hasta que no acabe la temporada si tenemos una posibilidad de entrar en el playoff, lo mejor es estar centrados y jugar cada partido".

El fin de semana sin partido, ya que se adelantó el choque ante el Tenerife porque este jugaba la Final Four de la Champions, ha servido a los ‘hombres de negro’ para descansar. En siete días jugaron tres compromisos anteriormente “y no tenemos una plantilla superlarga en la que podemos rotar, tenemos doce, no 14 y los que estamos, tenemos que intentar llegar físicamente lo mejor posible”.

Al hilo de esto, durante tres días la ciudad ha vivido centrada en la Champions, que aspira a jugar el Surne, como hace dos años. “La plaza de Bilbao le ha venido bien al torneo. Tengo una buena impresión, por el pabellón que tenemos, la afición que hay, todo el montaje de la Champions... se ha podido notar que Bilbao palpita baloncesto, no solo fútbol, es importante que la gente de aquí demuestre que le gusta y pueda ver un espectáculo así, y, a la vez, que vean fuera que el baloncesto en Bizkaia es una parte importante dentro de la sociedad bilbaína”.

Confiesa el preparador barcelonés que sintió “envidia sama” por estar ahí, porque “a todo el mundo le gusta estar en la Final Four y jugar una final”, a la que llegaron "dos grandes equipos que han realizado una gran temporada”. “Ganó el Tenerife como pudo hacerlo el Manresa. Desde aquí felicitamos a los dos por haber jugado una final tan bonita y una gran temporada, con ganas de estar ahí en algún momento”.