Los Lakers se libran de un pufo
Louol Deng ha dejado de cobrar de los Lakers el contrato que firmó en 2016. El alero, que solo disputó 57 partidos, se ha embolsado 72 millones de dólares.
Se acabó la vinculación entre Luol Deng y los Lakers. Ya era hora, como pensarán algunos. El que fuera alero de la NBA se retiró en 2019, pero seguía cobrando del equipo angelino gracias a un contrato firmado en 2016. Fue uno de los muchos desmanes contractuales del equipo angelino en su etapa más oscura, esa que fue de 2014 a 2020, con una serie de ausencias de playoffs totalmente contrarias a lo que representan como franquicia, desde un punto de vista histórico y también deportivo. Temporadas nefastas que se arreglaron parcialmente con la llegada de LeBron James y se olvidaron tras el anillo de 2020. Pero que están ahí, son recientes, y no dejan de ser parte de lo que ha sido un equipo que este año se ha vuelto a quedar sin playoffs con una plantilla mucho mejor a las que tenía por aquel entonces.
La fama y la reputación de Luol Deng se forjaron en los Bulls a las órdenes de Tom Thibodeau. Allí, junto a Derrick Rose, Carlos Boozer y Joakim Noah, entre otros, llegaron a las finales de la Conferencia Este en 2011. Un éxito efímero que parecía que se iba a extender en el tiempo hasta que Rose, MVP esa temporada, cayó en una espiral eterna de lesiones que le han acompañado ya de forma constante. Deng era famoso por su compromiso y dedicación: un buen anotador y un sólido defensor, Thibodeau, un hombre que miraba poco al banquillo, le utilizaba una cantidad ingente de minutos. De hecho, el alero lideró la competición en minutos en 2012 y 2013, años en los que además fue All Star.
En los Lakers, y ya lejos de su mejor nivel, Deng firmó su último gran contrato en 2016, en esos Lakers en los que Magic Johnson daba sus primeros pasos en la directiva para acabar diciendo adiós años después por la puerta de atrás, ya sin el apoyo de Jeannie Buss y con Rob Pelinka consiguiendo lo que él había dejado a medias (a Anthony Davis, claro). Magic firmó a Deng por cuatro años a razón de 72 millones de dólares, una cifra ingente en plena era de ascenso de salarios y con el convenio de 2017 a la vuelta de la esquina, pero ya con muchos beneficios del contrato televisivo de 2014, que daba a la NBA 24.000 millones en nueve años, una auténtica barbaridad. Y algo que les ha costado caro a los Lakers, que le han tenido que seguir pagando... hasta ahora.
El caso de Deng no es idéntico al de otros jugadores, como Chris Bosh o Kevin Garnett. El primero, por problemas de salud, se retiró antes de tiempo, pero siguió percibiendo su salario y en la 2018-19, sin jugar, era el mejor pagado de los Heat, con 25 millones de dólares. Garnett llevaba 21 temporadas en la mejor Liga del mundo y tenía un año de contrato por delante con sus Timberwolves, pero decidió poner punto y final a su espectacular carrera. Eso sí, recibió su dinero. En el caso de Deng, los Lakers trataron de no pagarle hace dos años, pero la NBA desestimó el recurso. Los angelinos estiraron y dividieron el dinero para hacerlo más asumible de cara al futuro y le han terminado de pagar este último año. Ha cobrado 5 millones de dólares, un sueldo solo por detrás de LeBron, Davis, Westbrook y Horton-Tucker. Idéntico, además, al de Kendrick Nunn. Para algunos, casi un fraude. Un pufo del que los Lakers por fin se libran. En época de crisi, no parece una gran alegría. Pero en fin: algo es algo.