Mumbrú: "Es un honor que el club piense en retirar mi camiseta"
El técnico del Bilbao Basket esquiva la pregunta de si la ceremonia-homenaje del miércoles tras el Madrid lleva el mensaje implícito de que está ante sus últimas semanas en Miribilla.
Es reticente a hablar del tema en la víspera de un partido, como ocurre ahora con la visita del Valencia mañana en la fiesta del baloncesto vizcaíno porque hay sesión previa con el Gernika, pero no le queda más remedio porque es el tema de la semana. Mumbrú verá retirada su camiseta con el dorsal número 15 el próximo miércoles tras jugar ante el Madrid, uno de sus exequipos. "Es un honor que el club piense en retirar mi camiseta, es un premio a mi vida deportiva como jugador. Es bonito que un club en el que llevo tantos años y me ha dado muchas cosas. Tenemos un partido importante y no sería bueno perder mucha energía en esto"
El acto del miércoles puede llevar un mensaje implícito: el exalero está ante sus últimas semanas en bilbao y es momento de tributarle el homenaje que quedó pendiente en 2018, cuando colgó las botas. Han sido trece años entre jugador y técnico y son muchos. El protagonista lo esquiva con maestría: "No sé, pregúntale a ellos. Es más un detalle a la vida como jugador. El club decide hacer un poco de historia. Cuando vas a cualquier cancha, ves camisetas de jugadores que han estado allí".
El Bilbao Basket acumula seis derrotas en siete partidos. Ha bajado el pistón, pero Mumbrú niega que el juego esté decayendo. "Por resultados, sí, pero hicimos un buen partido en Fuenlabrada, íbamos cuatro arriba a falta de un minuto y medio, con opciones de ganar. Cuando cometes errores en los últimos minutos, el partido puede caer del otro lado. Recuerdo este partido y el de Burgos, que hemos acabado con derrotas, pero el equipo ha estado compitiendo bien, con buenas sensaciones, pero sin llevarnos la victoria. Los resultados no son como nos gustarían, preferíamos tener dos o tres victorias más", remarca el preparador del Surne.
Un tema recurrente es la 'leña' que dan los rivales a Delgado, sabedores de que falla muchos tiros libres. La 'caza de Ángel' se denomina este proceso. Mumbrú sale en su auxilio: "Se ve en los tiempos muertos que los entrenadores piden faltas a Ángel. Cuando lo piden y luego ocurren, suelen ser antideportivas. Recibe muchas y cuando lleva cuatro hachazos, necesita comprensión por la parte arbitral, deben saber que puede tener la frustración de ver que es uno de los objetivos del otro equipo". Eso sí, considera que no deben obsesionarse excesivamente con el tema, "los árbitros están para hacer su trabajo". "Hay que intentar controlarlo, porque se vuelve en contra nuestra y del baloncesto. Si hay tres hachazos, parece que tienen que hacer faltas cada vez más duras para que la piten". El preparador barcelonés no quiso entrar a juzgar las palabras de Guardia, ayudante del Fuenla, en un tiempo muerto pidiendo a Samar hacer flopping "que ya lo protestaremos, porque llevamos cuatro faltas y ellos cero".
Por ciento, el pívot dominicano está dolorido en un costado por un golpe en el Fernando Martín y no ha podido entrenarse en toda la semana, "veremos si está en este partido porque todos sabemos de la importancia del juego interior que tiene el Valencia". El club no se obsesiona en buscar un fichaje tras la espantada de Bigote: "Se marchó, nos estuvimos moviendo, lo hacemos con las oportunidades. Hace tiempo que decidimos que si salía algo interesante, estaríamos pendientes, pero confiamos en los que estamos y esperamos ir sacando victorias".
Al Bilbao Basket le está penalizando su porcentaje paupérrimo en los tiros libres y no es cuestión de añadir más presión, "también somos de los mejores de tres, compensamos una cosa con otra". No cree Mumbrú que las derrotas en finales apretados sean por falta de concentración "sino de lectura y tener oficio". "Son dinámicas, en estos cinco partidos últimos hemos jugado cuatro fuera y en la racha buena, cinco en casa de ocho. Eso se nota. Ahora tenemos partidos complicados en casa y debemos hacer valer el efecto Miribilla". Lo principal ante el Valencia es "ser capaces de igualar su nivel físico, tienen juego interior muy potente". Por último, no fija la permanencia en una cifra concreta, aunque da la impresión de que con 12, es decir, una más, puede valer.