NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

NBA | LAKERS 103 - RAPTORS 114

Los Lakers no duran ni un cuarto

Nuevo golpe a los Lakers frente a su afición. Los Raptors pasaron como un vendaval por L.A. en los primeros minutos y después gestionaron su ventaja.

Los Lakers no duran ni un cuarto
Gary A. VasquezUSA TODAY SPORTS

En el baloncesto en general, y suele ocurrir muchísimo en la NBA, importa que sepas adaptarte al ritmo de un partido y no tanto que tengas un comienzo negativo si, con el paso de los minutos, vas encontrando tu sitio. Las remontadas están a la orden del día, no son una novedad. Multitud de primeros instantes desastrosos se han arreglado a partir del descanso o incluso antes. El problema es la incapacidad. Tienes que poder hacerlo, claro. Sentirte libre de cadenas para poner la cabeza en su sitio y revertir las malas rachas. Los Lakers, en el back-to-back que han protagonizado ante Suns y Raptors, se han metido en los encuentros con una total falta de tensión y acierto que ha hecho que, en la difícil situación que viven esta temporada, les fuera imposible siquiera rozar con los dedos al adversario una vez que se les había ido. Si ante los Suns encajaron 48 puntos en el primer cuarto para un -26, ante los Raptors se llegó a una máxima de 6-30 con un parcial de apertura de 2-21. Toronto se cargó el partido en 9:48 minutos. Después, pese a las ganas que le entraron a LeBron James de pelear hasta el último minuto, no hubo una mejora tal como para poner en peligro al rival. El único acercamiento por debajo de la barrera de los diez puntos se produjo cuando restaban 29 segundos en el cronómetro para que se acabara la cita, que lo hizo en 103-114.

James, autor de 30 puntos en 40 minutos con un buen 11/19 como tarjeta de tiro, se coronó como máximo anotador del partido. Gary Trent (28) y Pascal Siakam (27) destacaron por parte de los Raptors. LeBron, pese a su insistencia en no dar la noche por perdida hasta el final, se fue cabreado del Crypto Arena y evitó hablar con la prensa en la zona habilitada para ello.

Es otro día desastroso para los Lakers que sólo lo salva, como los últimos, el hecho de que los perseguidores estén teniendo muchos problemas para alcanzarles. La situación de los angelinos de cara al play-in parece estable desde hace unas jornadas con el noveno puesto que ostentan en la tabla de la Conferencia Oeste. Tienen un balance de 29 victorias y 39 derrotas en este momento. Los Pelicans también están dentro como décimos clasificados y, por detrás, a dos victorias del corte están Blazers y Spurs y los Kings batallan con otra más de desventaja. Con menos de un mes de margen los de Los Ángeles, aunque el aire les llegue viciado, pueden respirar mínimamente tranquilos. Les queda ver en qué momento físico está Anthony Davis, que debería volver en el momento de lucha directa por el título si el equipo quiere tener una pequeña opción.

Uno de los candidatos a Novato del Año, Scottie Barnes, se encargó de destruir a los Lakers en ese parcial fatal con el que se inició el encuentro. 15 de sus 21 puntos llegaron en ese 6-30 con el que se alcanzaron los 24 de diferencia y del que los locales no se recuperaron. Un tiro libre de Khem Birch puso el broche a esa racha. Lo que vino después fue lo de siempre: James tiró del carro lo que pudo, Westbrook (4/10 en tiros) fue un querer y no poder, salió a la palestra un secundario con buenas ideas -hoy fue Talen Horton-Tucker- y paren de contar. Toronto no necesitó tirar más cable, ya les valía con eso, Barnes no volvió a aparecer a ese nivel y el representante del equipo en el All-Star de este año, VanVleet (3/14 en tiros), no brilló en absoluto. El runrún continúa siendo una constante en el pabellón, que recibe pocas alegrías esta campaña, y con él se esfuman partidos como este y tantos otros. Vogel no sentó a LeBron en los últimos minutos y se intentó un arranque con Ellington en pista. Los canadienses aguantaron los tres minutos finales la barrera de los diez tantos a favor.