NBA | MAVERICKS 104 - THUNDER 102
La sonrisa de Doncic se amplía
Muy mal en el tiro, Doncic consiguió un triple-doble en el Día de Martin Luther King y lideró una nueva victoria de los Mavericks, esta vez ante los Thunder. Shai fue la oposición.
Los Mavericks siguen sumando, también en el Día de Martin Luther King. Sin demasiado brillo, ante rivales de toda clase y tampoco con una fiabilidad muy grande ni en ataque ni en defensa. Pero sumando victorias, al fin y al cabo, algo clave para evitar ese play-in que nadie quiere jugar y establecerse como el primer equipo detrás de los cuatro primeros de la clasificación de la Conferencia Oeste. Ese cuarteto que forman Suns, Warriors Jazz y Grizzlies y que parece inalcanzable por juego y resultados, pero que cuenta ahora con un boquete obvio entre el cuarto y el sexto, los Nuggets. Ahí emerge Dallas, un equipo que cuenta con la tranquilidad de no tener cerca, ahora mismo, a nadie por delante ni por detrás. Algo ciertamente relativo, ya que una pequeña racha negativa les volvería a dejar con los perseguidores muy cerca de igualarles.
Ante los Thunder, los Mavericks no han jugado nada bien. Tampoco su líder, Luka Doncic, que ha personoficado el juego de su equipo en una serie de lanzamiento espantosa: 4 de 17 en tiros de campo y 0 de 6 desde el triple. La línea de personal (12 de 14 desde ahí) rescató al esloveno, que sí consiguió un triple-doble (20 puntos, 11 rebotes y 12 asistencias), se contuvo en el último cuarto (5 lanzamientos) y no tuvo grandes errores en un final loco, marcado por los fallos y que los Mavericks resolvieron con mayor facilidad de la que dice el marcador (iban 104-99 con 9 segundos para el final), pero también con el agua al cuello: Jerome anotaba un triple que dejaba el luminoso apretado (104-102), Green fallaba dos tiros libres para los locales y OKC tuvo balón para forzar la prórroga o conseguir la victoria. Pero Giddey se equivocó en el pase y ahí se acabó todo.
La remontada de los Thunder, que jamás estuvieron por delante en el marcador y llegaron a perder de 22 puntos, fue gracias al buen hacer del equipo en la segunda parte: 60 puntos, 30 en el tercer cuarto y otros tantos en el último y definitivo. Pero el equipo de Jason Kidd se salvó de una derrota que habría sido hasta cierto punto ridícula (los Thunder, con 14-29, son penúltimos del Oeste) y consiguen su tercera victoria consecutiva, además de la novena en los últimos 10 partidos. Su mejor racha del curso para un 25-19, en ese ya mencionado quinto puesto, y con partidos en los que han decantado la balanza tanto con rivales menores (los Magic el otro día, OKC hoy) como con otros de un mayor bagaje, como Warriors, Bulls o Grizzlies.
Más allá de Doncic, hubo un poco de todo en los Mavericks: Hardaway anotó 12 puntos desde el banquillo y Powell llegó a 10. Además, 14+5+8 de Jalen Brunson, 13 de Porzingis, 8 de Klebber y 17, con 10 rebotes, de Dorian Finney-Smith. Y en los Thunder, 34 puntos de Shai Gilgeous-Alexander, ese talento que fue el que resistió las embestidasa texanas y lideró la remontada con 23 tantos en la segunda mitad. Luguentz Dort se fue a 18 y Josh Giddey a 10, pero con el fallo final cuando los Mavs estaban más hundidos y nerviosos que nunca. Más allá de eso, partido feo y soso en el que ambos equipos tiraron bastante mal (los Thunder superaron por poco el 40% en tiros de campo y los Mavericks ni siquiera llegaron a esas cifras), con muchas pérdidas de balón (13 de los visitantes y 11 de los texanos) y resuelto en un conglomerado de errores que decantaron la balanza para el equipo con más talento. Uno que, sin mucho brillo, está en racha. Doncic sonríe un poco más.