Kyrie Irving vuelve sin vacunar y es irremediablemente decisivo
Remontada de los Nets gracias a la aportación de sus tres mejores jugadores en un partido que se les escapaba. Kyrie Irving vuelve al nivel esperado.
Kyrie Irving ya está entre nosotros. No como la mayoría, porque continúan sin vacunarse y sólo podrá jugar los partidos en los que los Nets sean visitantes (com Toronto como excepción), pero ha vuelto. Ha sido una travesía de 31 semanas para él en los que se ha visto fuera de la NBA por su tozudez y posicionamiento frente al coronavirus, ahora le toca volver al estado de forma óptimo para poder aportar en los encuentros en los que sea posible su participación. Y, de primeras, se le ha visto bien. La franquicia le apartó por convencimiento y ha tenido que dar marcha atrás en plena lucha por su pervivencia tras las numerosas bajas y fichajes forzados para cubrirlas, optando finalmente por reactivarle pese a que sea un entrar y salir constante entre partidos como local y visitante. Indianápolis fue el lugar en el que pisó de nuevo las canchas de la Liga y vaya si su equipo necesita alguien como él. Los Pacers, desnortados esta campaña, llegaron a ir ganando por 19 puntos durante la segunda parte y la ayuda de Irving resultó fundamental para remontar y cortar una racha que ya subía a tres derrotas consecutivas.
Para los Nets fue una noche complicada en la que necesitaron de todo el poder de su big-three e incluso de un Mills poco tirador o de un Bembry sin fallos. Sólo con ello doblegaron a los Pacers, aferrados a una situación especial para intentar la victoria. A los locales se les fue en la segunda parte y el resultado fue 121-129.
Kyrie Irving empezó con la habitual fatiga del que se vuelve a enfrentar a un monstruo como la NBA, una picadora a nivel físico, y cometió un par de errores en la conducción y falló tres tiros nada más comenzar. Pero fue cuestión de ir recuperando la confianza. A pesar de que el que más anotó fue Durant, Irving se fue hasta los 22 puntos con varias canastas decisivas en momentos de arreón que los Nets necesitaron para cargarse la desventaja. Los Pacers, que no contaban con Caris LeVert pero sí con un recién fichado Lance Stephenson (en una vuelta a Indiana cuasisoñada) a 30 puntos la ración, se vieron atrapados en las redes que sólo Kyrie sabe tejer y no pudieron defenderle como es debido pese a que no sea un desconocido. El base nacido en Melbourne se fue por encima de la media hora de juego para su primer partido, una puesta en escena muy de este equipo y muy de este jugador que debe ir evolucionando para que la estrategia haga ganar al que, ahora sí, es un candidato a ser campeón.
El negacionista y poco realista Kyrie empezó como titular y con los nervios mencionados anteriormente. En un inicio sin demasiadas turbulencias apareció otro retornado, Stephenson, que parece que sólo juega bien cuando le fichan los Pacers. El veterano escolta empezó a pasar bloqueos con el balón en las manos como cuchillo en mantequilla y las metía todas, lo cual no es su especialidad, poniendo la guinda a un positivo primer cuarto con un triple sobre la bocina tras paso atrás. Los Nets, con dos 2+1 seguidos, no habían podido con Lance y sacaron de nuevo a pista a Kyrie para un segundo intento. Ahí funcionó mejor individualmente, pero los locales empezaban a marcharse en el marcador aprovechando las fisuras del rival. Dos ex de la Euroliga como Sykes y Sabonis, con este último acabando con un triple-doble, estiraban la ventaja y la situaban por encima de la decena al descanso. Durant cogió las riendas con su amplia gama de tiros, aquí y allá, pero la distancia bajaba muy poco a poco. Irving atacó con fuerza al final del tercer cuarto y ahí, con él como respuesta, sí empezó la escalada: seis puntos en un minuto, coronados por un tiro a seis metros del aro cuando se acababa el cuarto, y a mirar el último periodo como el de la remontada. Con 4:39 jugados en el periodo definitivo los Nets agarraron el marcador por la pechera y se pusieron por encima tras un triple esquinado de Mills. El parcial de 1-13 fue coronado por otros dos tiros en penetración de Kyrie, que no se quedaría ahí. En la franja final dos tapones, un lanzamiento de Durant y un par de acciones de Irving sentenciaron. El regresado, decisivo desde el primer día.