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NBA | THUNDER 108 - NUGGETS 94

Hay una estrella en Oklahoma

Shai Gilgeous-Alexander sentencia a los Nuggets y lidera la tercera victoria consecutiva de OKC. Los Thunder, heróicos, están a un partido del play-in.

Shai Gilgeous-Alexander sentencia a los Nuggets y lidera la tercera victoria consecutiva de OKC. Los Thunder, heróicos, están a un partido del play-in.
Alonzo AdamsUSA TODAY Sports

En mayo, los Thunder tenían 34 rondas del draft aseguradas hasta 2027. Ahora, tras el verano y la noche del draft, tienen todavía más. Nadie ha entendido por qué Sam Presti se ha empeñado en coleccionar una ronda tras otra en los últimos años, en los que no termina de iniciar una reconstrucción eternamente postergada. Porque sí, OKC se hace con jugadores en la lotería, aumenta su cantidad de baloncestistas jóvenes y mira al futuro. Pero ese futuro no termina de convertirse en presente cuando hace ya casi tres años que Russell Westbrook salió de la entidad para poner rumbo a Houston y a los infiernos, permitiendo al directivo hacer su magia particular y, al mismo tiempo, permitir que la gente empiece a considerar que lo que hace es una cosa muy diferente a la magia. Al menos, eso parece en la Ciudad del Trueno, que tuvo una cómoda prórroga con Chris Paul en sus filas antes de que el base dijese adiós, Presti coleccionara más rondas del draft y Billy Donovan saliera de los banquillos.

Desde entonces, no ha habido ningún tipo de proyecto deportivo en Oklahoma. Mark Daigneault se hacía con los mandos de un equipo lleno de caras jóvenes y empezaba una reconstrucción que no ha sido tal y que ha venido traducida en perder una cantidad ingente de partidos, probar cosas para ver quién se puede quedar en el equipo y quién no y, otra vez, mirar a un futuro que puede ser muy lejano. Las rondas del draft valen para apostillar procesos o hacer traspasos, pero es raro que un equipo construido exclusivamente con las mismas opte al anillo, el premio más grande. El talento gana campeonatos y parece que no había mucho de eso en OKC. Pero las cosas están cambiando, empieza a haber algo parecido a brotes verdes y hay jugadores prometedores en los Thunder. Y una futura estrella.

Shai Gilgeous-Alexander ha conseguido un triple-doble ante los Nuggets de 27 puntos, 11 rebotes y 12 asistencias ante los Nuggets. Ha sido la tercera victoria consecutiva de los Thunder, que se están aprovechando de las bajas constantes de sus rivales y de que nadie está bien, para emerger en una ultracompetitiva Conferencia Oeste y sumar ya 11 victorias. Antepenúltimos del Oeste, sí, pero a solo una victoria del puesto que da acceso al play-in, esa especie de previa que la NBA se inventó en la burbuja en pos de la justicia y que ha tenido una continuidad procedente, como todo, de los ingresos que ha percibido de esos partidos extra. Y todo esto, los Thunder lo están haciendo con con Shai promediando casi 22 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias por noche y gente que tiene mimbres y que tiene mucho que ofrecer en ese futuro que no llega, pero parece que, por fin, está empezando a llegar. Ahí no está Gabriel Deck, sin oportunidades en la franquicia. Pero sí Luguentz Dort, Darius Bazley o, en menor medida, Tre Mann.

En los Nuggets, que se quedaron en 18 puntos en el primer cuarto y en 14 en el tercero, no funcionó nada. Jokic, fundido de sostener al equipo de forma constante, jugó solo 25 minutos por la dinámica que llevaba el encuentro y se quedó en 13 tantos y 7 rebotes. Y con esa anotación fue el máximo anotador de su equipo, lo que da buena muestra del desastre constante que fue el equipo de Colorado. Y en los Thunder, además del triple-doble de Shai, hasta seis jugadores con dobles dígitos y una sonrisa muy amplia para encarar la próxima serie de cuatro partidos: en el primero y el último de ellos, contra los Suns, lo tienen complicado. Pero, entre medias, ante Pelicans y Kings, pueden seguir sumando y, quién sabe, dar algún susto de cara auna segunda parte de la temporada en la que las bajas van a pesar más en el resto de equipo que en OKC. En definitiva, hay mimbres, aunque sean pocos, en un equipo que perdió de 73 puntos ante los Grizzlies hace apenas 20 días. La mayor paliza de la historia dio lugar a una recuperación meteórica. En fin, quizá Sam Presti sepa lo que hace.