Memphis logra la mayor victoria en la historia de la NBA

La NBA tiene estas cosas: cualquier noche puede ser histórica. Un partido, un equipo o un jugador puede entrar en el libro de los récords en una noche cualquiera de un mes cualquiera. Y esto ocurrió esta pasada madrugada en Memphis. Era un día más de temporada regular en la Liga norteamericana entre los Grizzlies, un (inesperado) aspirante a los playoffs, y los Thunder, uno de los peores conjuntos de la NBA… hasta que los locales decidieron romper el mayor margen de victorias de siempre.

Los Grizzlies doblegaron a Oklahoma City por 73 puntos. Un 152-79 nunca visto en la historia de la Liga, que dejó en nada el anterior récord, el +68 (148-80) del 17 de diciembre de 1991 que le endosaron los Cleveland Cavaliers de Mark Price, Larry Nance padre y Craig Ehlo a unos Miami Heat con Glen Rice, Steve Smith, Willie Burton… Por ahí andaba, en los Cavs, un joven Steve Kerr de 26 años. Un tope que cae en el olvido tras casi 30 años de hegemonía.

El partido, como supondrán, dejó de tener vida muy pronto. En el primer cuarto, la diferencia era ya de 15 puntos (31-16) y al descanso, de 36 (72-36), el mayor margen en la historia de los Grizzlies tras los dos primeros periodos empatado con el mayor déficit de su rival en ese mismo lapso. En el tercer cuarto, la paliza era ya de aúpa: 113-62. La distancia llegó a ser de +78 con el 145-67 a tres minutos del final del partido. Casi nada.

Santi Aldama

Los 152 puntos también son la mayor anotación de siempre de Memphis, que jugó por tercer partido consecutivo sin Ja Morant, su gran estrella, aunque esto no pareció pesar en un equipo que tuvo once jugadores con 10 o más punto, incluido el español Santi Aldama, que completó su mejor actuación desde que aterrizó en la NBA: hizo 18 puntos, 10 rebotes y 3 asistencias en 28 minutos sobre la pista. Los Grizzlies obtuvieron un +52 con él en cancha: nadie había tenido semejante +/- en la historia de la franquicia. El máximo anotador del encuentro fue Jaren Jackson con 27 tantos (6/7 en triples).

Oklahoma vivió una auténtico infierno sin Shai Gilgeous-Alexander, ausente por el protocolo de conmoción cerebral en el que fue incluido tras sus 39 puntos contra Houston Rockets del miércoles. Los Thunder lanzaron por debajo del 35% (32,9%) por el 62,5% de su rival que machacó con un 52% desde el triple, 19-36, dominó el rebote (53-26) e hizo de la circulación de balón (41 asistencias) sus principales armas. Sus 82 puntos en la pintura fueron más que el total de Oklahoma, es la primera vez en el siglo XXI que esto pasa. Gabriel Deck estuvo en cancha 22 minutos (récord de la temporada). Anotó 4 puntos, atrapó 2 rebotes y dio 2 pases de canasta para OKC.