Dejan Kravic lidera el asalto a Gran Canaria

No pudo tener mejor estreno la etapa de Salva Maldonado al frente del Hereda San Pablo. Tras una larga serie de derrotas, su equipo acaba de vencer en la pista de un sobrepasado Gran Canaria, que vencía 70-62 al alba del último cuarto y fue incapaz de contener el definitivo asalto visitante. Kravic dominó por completo ambas zonas, y Marc García tuvo un excelente regreso a las canchas tras superar sus problemas cardiacos.

Espoleado por la llegada de su nuevo entrenador, un Salva Maldonado que siempre será más que bien recibido en Gran Canaria, el electrizante comienzo de partido del San Pablo Burgos amenazó con dejar malherido en la cuneta al equipo local, que empezó 5-0 ganando rápidamente vio como perdía el control de la situación. El más activo de los azules era el siempre intenso Dejan Kravic, una bola de demolición en la zona amarilla que, con seis puntos consecutivos, ponía a los suyos 7-13.

Ya había entrado en escena un recuperado Marc García, que se alió con el gigante balcánico para darle el primer +10 al Burgos, 9-20, antes de que Benite descerrajara un triple para el 11-23 ante un impasible Gran Canaria. Ya con los Diop en cancha, pudo entrar en vereda el equipo de Porfirio Fisac, que contaba con la baja de Albicy tras la fechoría de la federación francesa, mas un triple de nuevo de Benite supuso un jarro de agua fría cuando el primer cuarto tocaba a su fin: 18-26.

Parecía venirse arriba el Granca cuando se topó con otro enceste desde más allá del 6,75, en este caso de McGee, nada más reanudarse el partido. Enrabietada, la segunda unidad del equipo insular quiso dar un fuerte puñetazo sobre el parqué, y entre Kramer y Khalifa Diop (8+7 en la primera parte) se produjo la resurrección amarilla, todo un hecho cuando una bandeja del base tras recorrerse toda la cancha puso a los suyos 32-31.

No se dejaron achantar los muchachos de Salva Maldonado, que volvieron a tomar aire tras un triple de Salash que les ponía otra vez al mando del partido: 32-38. Sin embargo, un último arreón del Gran Canaria, coronado por la primera canasta en juego de Pustovyi, un mate, le permitió irse al descanso dominando el marcador: 39-38.

Sumó la formación insular un actor nuevo a su reparto cuando Shurna, desde una esquina, conectó un triple, su primera canasta del partido, para el 46-42. Intentaban percutir los visitantes, pero un póster de Pustovyi a McGee, que incluyó además un tiro libre, mantenía al Gran Canaria con ventaja: 49-45. Sin embargo, la rendición no parece entrar en los planes del contestón San Pablo Burgos, que devolvía cualquier golpe recibido. Así, un triple de Benite supuso un ajustado 55-53 justo después de que Ennis se colgara del aro visitante en la cara de Rabaseda.

Cuando mejor estaba el equipo de Maldonado pareció despertar el Gran Canaria, que con sendos triples de Brussino y Slaughter, más un palmeo de Diop, presentó sus credenciales para hacerse definitivamente con el mando del partido: 65-57.

Un triple de Kramer al alba del último mantenía la balanza a favor de su equipo: 70-62. Pese a que los pibes de Fisac lo tenían todo a favor, el partido viró, definitivamente, hacia territorio burgalés. Marc García demostró su total recuperación con otros cinco puntos seguidos que minimizaron la renta local, 73-71, y un triple acto seguido de Nikolic le dio de nuevo la ventaja al siempre competitivo San Pablo Burgos, que no volvió a ceder. Kravic se había puesto el partido por montera, infinitamente superior a cualquier interior del Granca, acaso el mejor jugador, de largo, del partido.

Cinco puntos seguidos de Ennis fueron brisa de esperanza para la Isla, 80-78, pero ahí llegó el definitivo apagón local, incapaz de frenar el parcial de 0-11 con el que San Pablo Burgos certificó su triunfo. Se pincha así en cierta manera el globo del Gran Canaria tras su gran inicio de curso, mientras que Salva Maldonado tuvo el estreno soñado: debut con victoria en campo de uno de sus ex equipos, poniendo además freno a la racha de seis derrotas consecutivas de su nuevo equipo.