Carreteras cruzadas en el Este: Charlotte Hornets (cinco victorias seguidas, 10-7) ganó (121-118) a Indiana Pacers (tres derrotas consecutivas, 6-11) en un partido extrañísimo en el que los de Carolina lo bordaron para tomar ventajas de 25 puntos en el tercer cuarto y casi la pifian después. Rick Carlisle, que maneja un equipo disfuncional en Indiana, retiró a su quinteto (Domantas Sabonis, Myles Tuner, Malcolm Brogdon, Caris LeVetert, Chris Duarte) sin llegar al ecuador del tercer cuarto. Ningún de esos titulares volvió a pista y los suplentes (anotaron 78 puntos, el 71% de los totales del equipo) casi firman una remontada prodigiosa: el liderazgo de Torrey Craig (14 puntos, 7 rebotes), los puntos de Jeremy Lamb (23), las apariciones de Wanamaker (12) y el trabajo de Goga Bitadze (11+4) convirtieron un 118-101 a falta de tres minutos y medio en un 121-118 con bola para los Pacers y 16 segundos por delante. Pero, sin tiempos muertos, los visitantes no pudieron ni sacar un triple para intentar empatar.

Carlisle habló de la actitud de esa segunda unidad, casi un escuadrón suicida, y sugirió posibles cambios. Se atisban: en pista y en los despachos. Los traspasos pueden estar en camino en un equipo perdido, sin ninguna química en su primera unidad, con los problemas de siempre (ahora amplificados) para hacer funcionar a la pareja Domantas Sabonis (solo 8 puntos y 6 rebotes)-Myles Turner (4+4). Algo hay que hacer en los Pacers.

Los Hornets pasaron de perder una bola en la primera parte a 16 en la segunda. Las últimas muy tontas, la última incomprensible, un pase cuestionable a Bridges de un LaMelo Ball que casi estropea así un partido que había sido excelente: 32 puntos, 11 rebotes, 8 asistencias. Él y Gordon Hayward (25+4+3) condujeron una locomotora que dio una excelente imagen antes de esa siesta demasiado prematura y que casi cuesta cara. Pero ahí están los Hornets: después de cinco derrotas seguidas han sumado cinco triunfos y están quintos del Este. Con las excelentes sensaciones que ni se atisban en Indiana.

Los tiros libres de James Harden deciden

Después de la derrota contra los Warriors, los Nets han sacado adelante con mucho sufrimiento sus partidos contra Cavaliers y Magic, este último (115-113) después de remontar 19 puntos y gracias a los tiros libres de James Harden: 19/20 para acabar con 36 puntos a pesar de un 7/25 en tiros y un 3/13 en triples. Un 10-0 acercó a los locales antes de la segunda parte (53-62 al descanso) y un buen tercer cuarto pareció dejar casi hecho (90-83) un triunfo que se complicó mucho (a partir del 92-92). Los Magic estuvieron vivos hasta el final, pero Cole Anthony no acertó con la jugada en la que intentó mantener la posesión tras fallar a propósito el segundo tiro libre. Acabó con 16 puntos y 9 asistencias que se sumaron a los 17+5 del muy buen rookie Franz Wagner y a los 21 puntos de Jalen Suggs: el número 5 del draft va a más. En los Nets, además de los puntos sufridos de Harden, muchos fallos y muchos tiros libres, Patty Mills anotó 22 puntos y desde el banquillo tuvieron una producción clave James Johnson (17 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias) y LaMarcus Aldridge (15+5). Los Nets salvaron el pellejo sin Kevin Durant, baja de última hora por una lesión de hombro que ya le había molestado en los últimos partidos. Veremos cómo evoluciona.

Los Bucks y los Bulls siguen sumando

En Milwaukee también hubo amago de remontada a priori imposible, pero finalmente los Bucks sometieron a los Thunder (96-89) sin brillo y con sufrimiento. Pero ya están en el 50% (8-8) en un inicio de temporada marcado por las bajas y los problemas para el campeón. Una ventaja de 20 puntos pasó a ser un +2 (84-82) a ocho minutos del final. Los Thunder, que este año compiten prácticamente todas las noches, tuvieron varios tiros para consumar el vuelco, pero no estuvieron acertados. Shai Gilgeous-Alexander (17 puntos, 2/12 en triples) falló a falta de 49 segundos, con 91-89, y después sentenció un Giannis Antetokounmpo que acabó con 21 puntos, 19 rebotes, 7 asistencias y 4 tapones. Khris Middleton sumó 16+8+4, Portis 17 puntos y 13 rebotes y los Bucks ganaron a un rival menor pero muy digno: 6-9 ahora, otra vez con buenos minutos del rookie Josh Giddey (14 puntos, 12 rebotes, 4 asistencias).

En Denver, los Bulls aprovecharon (108-114) la ausencia de Nikola Jokic para llevarse un triunfo que les permite cerrar en positivo (3-2) una gira durísima por el Oeste, además sin Nikola Vucevic, y de paso ganar en Denver por primera vez desde 2006. Sin el MVP, los Nuggets pelearon y estuvieron en el partido hasta el final. Pero decidió un gran último cuarto de Zach LaVine (12 de sus 36 puntos) y la sangre fría desde la línea de tiros libres: 24/24, 12/12 para un DeMar DeRozan que acabó en 26+4+4. En los Nuggets lideraron Aaron Gordon (28 puntos, 9 rebotes y 4 asistencias) y Will Barton (23+4+3). Y el Facu Campazzo aprovechó sus minutos (28): 16 puntos, 4 asistencias y un 4/5 en triples.