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Virtus Bologna
96
Valencia Basket
97
Finalizado

EUROCUP | VIRTUS 96-VALENCIA 97

El Valencia revienta a la Virtus Bolonia en su guarida

Los taronjas llegaron a ir perdiendo por 21 puntos pero una sensacional remontada en el segundo tiempo le da una victoria de mucho prestigio en el Paladozza.

Los jugadores del Valencia Basket celebran la victoria.
Los jugadores del Valencia Basket celebran la victoria.Matteo Marchi / Virtus Segrafredo Bologna

El Valencia hace historia en Bolonia. Este equipo de Joan Peñarroya tiene mucha casta. Con todos los problemas de lesiones que está teniendo en este principio de temporada, ante una Segafredo Virtus en modo playoff de Euroliga, en un Paladozza encendido con su equipo y 21 puntos abajo mediado el segundo cuarto... lo normal era no gastar energías, acabar rápido, ducha caliente y avión para casa.

Pero no. El Valencia luchó al límite de sus fuerzas, le dio la vuelta al partido y se llevó una victoria de Bolonia que puede significar un punto de inflexión en la temporada taronja. Es sólo el cuarto partido de esta Eurocup pero vencer, remontando, en casa de los Teodosic (18 puntos, 9 asistencias y 5 rebotes), Weems (30 puntos) y el campeón de la NBA Belinelli (10 puntos) en un partido a casi 100 puntos, tiene mucho mérito. 122 créditos de valoración para los taronjas hacen una idea del excepcional partido que cuajaron. Y eso que en los primeros 15 minutos dieron "vergüenza", como dijo Prepelic tras el partido.

Prepelic, clave

El escolta esloveno fue clave, con 20 puntos, la mayoría de ellos en el segundo tiempo; pero también brillaron en la planilla Van Rossom (15 puntos y 6 asistencias) y Dubljevic (10+5). Sin embargo, fueron dos imberbes los que aguantaron el tipo cuando el huracán Virtus arreciaba con fuerza. Millán Jiménez, fabuloso en defensa y con dos triples clave, y sobre todo Jaime Pradilla (6 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias) que apuntó su nombre y apellido en la libreta del seleccionador Scariolo de cara a las ventanas.

Inicio arrollador

El Valencia sintió pasar un tsunami por encima desde el salto inicial. Salir blando en el Paladozza te lleva a esto. Y si encima Teodosic está en plan mago y Weems mete todo lo que pasa por sus manos, puedes darte por muerto. 33 puntos encajó el Valencia en el primer cuarto. Nervioso y dubitativo de inicio, sólo los lanzamientos exteriores de Van Rossom y la salida a cancha de Pradilla le mantuvieron a una distancia razonable.

Sin embargo, la Virtus salió dispuesta a cerrar el partido en los primeros 20 minutos. Y a punto estuvo de hacerlo. Un arreón inicial con Belinelli y Cardonier marcaron un parcial de 13-2 que mandaban al Valencia a la lona. Un triple de un sensacional Weems puso la máxima ventaja (46-25, min. 13) en todo el partido. Ahí Prepelic apareció, con un 3+1 incluido, para poner el desfribilador en el corazón del Valencia Basket. Esto coincidió con la mejor fase en defensa taronja lo que le hizo ir limando la renta. Sin embargo, Weems, a lo suyo, 20 puntos en los dos primeros cuartos, no dejaba acercarse demasiado a los valencianos (57-45 al descanso).

La remontada

En el tercer acto, el Valencia dio un zarpazo a los boloñeses. Con Prepelic que abrió el tarro de los puntos y una defensa mucho más activa y agresiva, cortando líneas de pase, el Valencia se fue acercando. Y eso que un par de decisiones arbitrales desesperaron a Peñarroya. Dos triples seguidos de Labeyrie y Hermannsson acercaron muchísimo a los taronjas (75-70, min. 29). Cuatro puntos de Mannion y dos de Rivero lo dejaron en 79-72, con un cuarto por jugar.

Pero el que quedaba fue un cuarto histórico. Con Rivero, Dubljevic y Labeyrie fajándose en la pintura, López-Arostegui aportando, atrás y delante, con un 2+1 clave, y la templanza de Van Rossom y Hermannsson, doblegó al gigante italiano por primera en Italia. Un triple de Dubi puso por primera vez en todo el partido al Valencia por delante (86-87, min. 38). Ahí ya era Teodosic contra todo el Valencia. Y la fuerza del grupo venció al talento del serbio, más empeñado en coaccionar a los colegiados, que de su propio equipo. Un triplazo de Prepelic puso el 90-91, a falta de 51 segundos. Y ya nunca más se pusieron por delante los transalpinos. Infalible en los libres, los taronjas abrazaron un triunfo de mucho prestigio que le mantiene arriba en la tabla.