Los 10 aspirantes al anillo de la NBA
Los Bucks defienden título con una amenaza gigante en la Conferencia Este, los Nets de Kevin Durant, y muchas dudas por resolver en un Oeste con los Suns en la pole position.
Nadie habría apostado por unas Finales con Milwaukee Bucks y Phoenix Suns antes del inicio de la pasada temporada. Los de Arizona llevaban desde 2010 sin jugar playoffs y los de Wisconsin parecían más cerca de la desintegración del proyecto Mike Budenholzer/Giannis Antetokounmpo que de la gloria que alcanzaro con su primer anillo desde 1971. Un año antes, prácticamente nadie se la habría jugado por una colisión entre los Lakers y los Heat. Estos últimos ni siquiera estaban en muchas apuestas cuando se reinició la competición en la burbuja de Florida. Y los Lakers… tenían a LeBron James y Anthony Davis, pero arrancaron la temporada 2019-20 con muchas dudas sobre su rotación y, teóricamente, muy por detrás de unos Clippers que fueron el gran candidato por consenso durante meses. Y en las Finales anteriores, en 2019, se proclamó campeón otro inesperado apenas semanas antes: Toronto Raptors.
Así que es casi imposible acertar con las conjeturas antes del inicio de curso, del fuego real, de ir viendo dónde y cómo está cada uno. Antes de que pasen las semanas, sepamos cómo van unos y otros de química y veamos quién sale crujido y quién evita al demonio juguetón de las lesiones. Pero, a priori, se puede separar un tercio de la Liga, diez franquicias que tienen opciones legítimas, o derecho a sentirlo así, de ser campeonas.
Estos son los diez aspirantes al anillo, por orden descendente. Primero, el de menos opciones. En el número 1, el gran favorito:
10. PHILADELPHIA 76ERS. Un asterisco gigantesco, uno australiano. Ben Simmons. El nexo del jugador y los Sixers se rompió en la traumática eliminación ante Atlanta Hawks, en el séptimo partido de las semifinales del Este. Sin él, los Sixers cambian el formato de su actual proyecto. Si lo traspasan, el juicio dependerá de qué obtienen a cambio. Si se quedan como están ahora… parecen menos que Bucks y Nets en el Este. Joel Embiid tiene ya 27 años, cumplirá 28 de hecho antes de los próximos playoffs. Y con él siempre está el asunto de cuánto durará su prime, dado su historial con las lesiones. Seguirá siendo un aspirante al MVP, el líder de una defensa temible (incluso sin Simmons) y el referente de un ataque con tiradores (Curry, Green, Korkmaz…) y en el que Tobias Harris suele deshacerse en los momentos menos oportunos.
9. LOS ANGELES CLIPPERS. Otro asterisco gigantesco: la lesión de rodilla de Kawhi Leonard en los pasados playoffs no solo dejó al equipo sin opciones entonces (aunque jugaron muy bien y pelearon hasta el final sin él) sino que condiciona este curso. Si no vuelve en absoluto, es imposible imaginar a unos Clippers campeones. Si lo hace ya cerca de los playoffs y con necesidad de rodaje, parecido. Pero si acorta plazos, vuelve a tiempo y está en forma en playoffs… Su historia de lesiones en el tren inferior obliga a pensar, en todo caso, en plazos de máxima precaución. Los Clippers, mientras, serán duros, difíciles de batir, con Paul George al frente.
8. DENVER NUGGETS. Otra lesión lo condiciona todo: Jamal Murray cayó fulminado el 12 de abril. Su rodilla dejó a los Nuggets en tierra de nadie cuando parecían haber ensamblado un equipo que podía hacer algo grande de verdad. Tras la llegada de Aaron Gordon en el mercado invernal, la primera unidad (Murray, Will Barton, Gordon, Michael Porter y el MVP Nikola Jokic) estaba abrasando a los rivales con ratings de otra galaxia. Como en el caso de Kawhi, lo tardía de la lesión y del calendario de la temporada pasada obliga a pensar como mínimo con cautela. Pero con Murray de vuelta a tiempo y en forma los Nuggets pueden ser uno de los mejores equipos de los playoffs. Mejorar en defensa ayudaría también, claro.
7. MIAMI HEAT. La temporada pasada fue tremendamente decepcionante en Miami. La magia de la burbuja desapareció y el finalista del Este estuvo lejísimo de aquel nivel, con lesiones de Jimmy Butler y Bam Adebayo y un nivel muy flojo de jugadores como Dragic y Herro (y escasa aportación de Oladipo, Ariza, Iguodala, Bradley, Harkless…). Pero para esta temporada, los Heat han sido ultra agresivos. Se han llevado a PJ Tucker y a Kyle Lowry y han tirado de billetera para extender a Butler y retener a Duncan Robinson. Tienen bloque profundo y perfecto para el estilo Spoelstra, y puede ser el equipo de trincheras del Este que se cuele por cualquier hueco que se abra en cuanto tengas problemas los demás. ¿Quién quiere tener enfrente en playoffs un quinteto con Lowry, Butler, Robinson, Tucker y Adebayo al que se suman Herro, Oladipo, Strus, Dedmon, Markieff…?
6. UTAH JAZZ. En cierto modo, el sueño de los Jazz es ser los Bucks del Oeste. El equipo que después de varias temporadas a un nivel extraordinario en regular season, consigue dar también el gran salto adelante en playoffs. En el último lustro solo han bajado una vez del 60% de triunfos en fase regular, pero no han jugado ninguna final de Conferencia. Su apuesta era mantener el bloque, y lo lograron dándole a Mike Conley 68 millones por tres años. Así que volverán a intentarlo en su formato habitual, con el orden de Quin Snyder y la jerarquía de Donovan Mitchell en ataque y Rudy Gobert en defensa. Rudy Gay llega para intentar dar soluciones que hasta ahora no han tenido en playoffs, donde tendrán que demostrar que pueden ser más de lo que hemos visto en las últimas temporadas.
5. GOLDEN STATE WARRIORS. La temporada pasada se estrellaron por duplicado (Lakers, Grizzlies) en el play in y Stephen Curry, a pesar de que hizo un año absolutamente extraordinario, vio los playoffs por televisión. Parte de la solución está en Klay Thompson, que apunta a un regreso en diciembre después de dos temporadas completas en blanco. Si el escolta está todavía cerca de su mejor nivel, los Warriors pueden protagonizar una carga furiosa: ha vuelto Iguodala, ya muy veterano, y Otto Porter parece un complemento perfecto para Curry, Klay y Draymond Green. Jordan Poole es un jugador de rotación cada vez más valioso, Wiggins sigue trabajando en su IQ y la duda es cómo desarrollar a dos jóvenes talentos mientras se piensa en competir ya a lo grande: James Wiseman y Jonathan Kuminga.
4. PHOENIX SUNS. El campeón del Oeste y un equipo que mantiene su bloque intacto, con la continuidad de Chris Paul garantizada a precio de oro: cuatro años y 120 millones (los dos últimos años no totalmente garantizados) para un base de 36 años (uno de los mejores de la historia, eso sí). En el fondo de armario, llegan Elfrid Payton y Landry Shamet, y se sentirá la baja de Dario Saric, que se lesionó de gravedad en las Finales, donde los Suns se pusieron 2-0… y no ganaron más. El primer título de la historia de la franquicia es el gran reto, otra vez en manos de Paul, el fantásticoDevin Booker y dos jóvenes en ascenso como Mikal Bridges y un DeAndre Ayon cuya no extensión de contrato planea como una extraña sombra sobre este proyecto, que encontró la temporada pasada la dirección adecuada.
3. LOS ANGELES LAKERS. ¿Cómo ubicar a los Lakers? Un equipo que apunta a ausencia de grises, a éxito abrumador o colapso extraordinario. Tienen suficientes señales de alarma para pensar en lo segundo: demasiada veteranía (LeBron James a la cabeza), la cuestión de cómo de útil puede ser un Russell Westbrook que necesita cierta reeducación y las lesiones habituales de Anthony Davis. Pero si este se mantiene sano y a LeBron le queda al menos un último gran curso (y eso ha parecido en pretemporada), y si las piezas van encajando… entonces los Lakers pueden ser el gran favorito del Oeste. Tienen más tiro, más puntos para el ataque y, en teoría, mucha menos fortaleza defensiva que las pasadas temporadas. Veremos.
2. MILWAUKEE BUCKS. Aquí está el campeón. Con el bloque casi intacto. El casi es PJ Tucker, que se ha ido a Miami Heat. Un jugador importante cuya ausencia rellenará, en parte, el regreso del escolta Donte DiVincenzo, que no jugó por lesión las Finales. Bobby Portis, un héroe inesperado, renovó, y llegan Grayson Allen y el retornado George Hill. Pero todo estará, una vez más, en manos del big three: Jrue Holiday y Khris Middleton como escuderos de un Giannis Antetokounmpo que jugó unas Finales de leyenda y que tiene margen para seguir mejorando. Eso asusta. Va a por su tercer MVP… y a por su segundo anillo. A nada que fallen las cosas en los Nets…
1. BROOKLYN NETS. Un equipo imposible de descifrar, distinto a todos los proyectos faraónicos que ha visto la NBA. Es, entre unas cosas y otras, la tercera temporada de Kevin Durant y Kyrie Irving en la Gran Manzana. Pero el alero se perdió la primera por la lesión que arrastraba de las últimas Finales con los Warriors y Kyrie ha estado poco sano... y ahora empieza apartado por el lío de su no vacunación. Muchas dudas, pero la certeza de que solo con Durant y James Harden ya hay un súper candidato al anillo, pase lo que pase con Kyrie. Porque Durant es un jugador divino y porque el fondo de armario es lujoso: Joe Harris, Blake Griffin, Patty Mills, Jevon Carter, Bruce Brown, Paul Millsap, LaMarcus Aldridge (que aparca su retirada), Nic Claxton… La temporada pasada, las lesiones de Kyrie y Harden lo torcieron todo. Y, aún así, Durant estuvo a un pelo de cargarse, casi solo, a los Bucks en segunda ronda. Si todo va bien en Brooklyn, estos Nets debería ser favoritísimos para el anillo 2022.