La vacunación y los protocolos sanitarios para controlar la COVID-19 siguen siendo un asunto crucial para la temporada 2021-22 de la NBA, por mucho que la Liga haya recuperado buena parte de la normalidad perdida en la segunda mitad de la 2019-20 y durante el pasado curso, 2020-21. Estados Unidos sigue lejos de superar el trance de la pandemia, y el número de muertos en el país ya supera los 700.000 confirmados y vinculados directamente con la COVID. Mientras, la negativa de un porcentaje demasiado alto de la población a vacunarse ha frenado la lucha contra el virus justo cuando la disponibilidad de vacunas empezó a ser óptima. En la NBA abrieron con los training camp para la pretemporada con un 90% de jugadores vacunados, lo que dejaba unos 60-70 sin hacerlo. Es decir, unos dos por franquicia. Muy peligroso. Según han avanzado los días de entrenamiento, esa cifra ya ha llegado al 96%.

Los jugadores no vacunados no tienen prohibido jugar por normativa NBA. La Liga, además, no pudo hacer obligatoria la vacunación entre los jugadores porque se encontró con la negativa del NBPA, el sindicato. Otros estamentos (árbitros personal de oficina…) sí tuvieron que vacunarse para seguir llevando a cabo su desempeño laboral. Pero más allá de las normas internas de la NBA, están las reglas sanitarias de las ciudades en las que están localizados sus equipos. Y en tres de ellas los jugadores no vacunados no podrán estar en los partidos de sus franquicias como locales, cuando jueguen en su pista. Son San Francisco, Nueva York y Los Ángeles. Esto ha creado unos tremendos problemas con, por ejemplo, Andrew Wiggins en los Warriors (acabó vacunándose). Y el caso más mediático: un Kyrie Irving apartado de Brooklyn Nets, el gran favorito al anillo, hasta que acepte vacunarse.

Lo que la NBA sí ha dejado claro es que los no vacunados que se pierdan partidos relacionados con los equipos de estas tres ciudades (Knicks, Nets, Warriors, Lakers, Clippers) no cobrarán la parte proporcional a esos encuentros. Sí el resto de sus salarios. Knicks, Lakers y Clippers ya anunciaron que habían llegado al 100% de vacunación en sus filas. Para Kyrie Irving, por ejemplo, esta medida puede suponer pérdidas de hasta 17 millones de dólares, con unos 380.000 dólares que se van al limbo por partido. En regular season los Nets tienen 41 como equipo local y dos más en su mercado, Nueva York, en visitas a los Knicks.

Además, y a falta de que se firmen oficialmente con el acuerdo del sindicato de jugadores, también habrá protocolos mucho más duros y que recordarán a la dificilísima temporada pasada para los no vacunados. Los que sí hayan recibido la vacuna van a vivir exentos de muchas de las normas que han tenido que seguir a rajatabla en la última temporada y media. Los no vacunados, en cambio, seguirán teniendo que someterse a controles, tendrán cuarentenas más largas en caso de contacto de riesgo, tendrán que llevar siempre mascarillas y estar a dos metros de cualquier otra persona en las reuniones y charlas, comerán en sitios separados, tendrán sus taquillas del vestuario apartadas… y estarán obligados a permanecer en su domicilio cuando estén en su ciudad o en el hotel cuando el equipo está jugando como visitante, sin visitas a lugares de ocio considerados de riesgo (restaurantes, bares…) y con unas pocas excepciones: hacer la compra, llegar a los hijos al colegio…