El Barça recurre a los habituales y Hayes para ganar en el estreno

El Barça ha concluido con victoria su primer compromiso de la pretemporada. Lo ha hecho venciendo al Andorra en su terreno por 72-81, un resultado maquillado al final pero que expresa el buen punto en el que el club azulgrana ha iniciado una campaña que promete ser explosiva y en la que se esperan mejorar los ya buenísimos resultados de la anterior. La prueba inicial se la ha llevado el conjunto aquí visitante, que ya tiene entre ceja y ceja la SuperCopa, título que se le resistió el año pasado, con la plantilla cerrada salvo que haya sorpresa con Pau Gasol. Un comienzo en positivo para este equipo. 

Con Juan Carlos Navarro, encargado de la sección desde la pasada primavera, tendrá esta temporada la primera completa en el cargo. Fue uno de los espectadores de primera fila de este debut de su equipo en pretemporada en las instalaciones de Encamp, donde ya es habitual que el Barcelona se concentre para la primera toma de contacto. 

Debutaron tres de los cuatro fichajes del verano. El que faltó es Nico Laprovittola (Argentina), al igual que el otro olímpico culé: Álex Abrines (España). El que sí estuvo en la cita de Tokio y sí jugó este partido fue el checo David Jelínek, exterior de MoraBanc Andorra. 

El cuadro de Sarunas Jasikevicius tuvo las primeras ventajas, cortas pero efectivas para mantenerse por delante en el marcador. Haciendo la goma pero controlando. Hasta que llegó el 20-20. Habíamos visto una primera alineación conservadora, con un Mirotic sin resolver que mejoraría en la segunda parte y un Sanli que pasaba de pelear el balón por el suelo a poner un tapón en las alturas. Ese empate en el marcador fue el impulso para que el Andorra creciera, sobre todo en defensa, al aprovecharse de los cambios introducidos por su rival, que en el segundo cuarto jugó minutos con Oriola como referencia veterana y Martínez, Jokubaitis y dos canteranos a su lado. Los del Principado estrangularon los ataques medianamente fluidos del Barça y con ello pudieron irse delante al descanso: 37-34. 

Tras el paso por los vestuarios, otro cantar. El Barça se había quedado en doce puntos en la segunda manga y en la tercera iba a darle de su medicina al Andorra. Con Davies y Smits de pareja interior y Nick Calathes dirigiendo todo iba a ser muy diferente. Mediado este tercer periodo llegó el vuelco definitivo, provocado por uno de los nuevos integrantes de la plantilla barcelonista: Nigel Hayes, procedente del Zalgiris, clavó tres triples en tres intentos seguidos para pasar de perder por alrededor de cinco a ganar por alrededor de cinco. Y un par de acciones de Nikola Mirotic serían las que sellarían esa ventaja. Diagne, más movido aún de los habitual en él, y Miller-McIntyre le metían intensidad y con Hannah el ataque iba mejor que por el cauce de García, pero la diferencia se haría incluso más grande en el último periodo tras el 13-25 de parcial del penúltimo. Saras introdujo cambios para probar cuando ya se veía quince arriba, lo que llevó el partido por un sendero tranquilo hasta el final. La cita terminó con el apretón múltiple de manos en 72-81. 

Jasikevicius le dio protagonismo a los jóvenes en varias franjas del encuentro. Sin contar a Rokas Jokubaitis, que también, pero en cuanto a canteranos anduvieron intermitentes Bonilla y Caicedo y el que destacó sobre todos fue el uruguayo Agustín Ubal, que llevó la batuta muchos minutos y fue de los que mejor se desenvolvió con lo que le pedían. Justo hoy se anunciaba que Marcos y Badio, dos destacados del B, se irán cedidos al Lleida esta próxima temporada.