Los Celtics se rinden con Kemba

En plenos playoffs, antes incluso del combine del draft 2021, llega un traspaso importante y sorprendente, uno que no suele hacerse en este momento del calendario. Pero aquí estamos: los Celtics envían a Kemba Walker a Oklahoma City Thunder. Para liberar su salario (73 millones de dólares las dos próximas temporadas) incluyen en la operación su pick de primera ronda del próximo draft (número 16) y una segunda ronda de 2025. A cambio, reciben al pívot Al Horford, que vuelve al Garden, un pívot joven como Moses Brown y una segunda ronda de 2023.

Los Celtics desisten con Kemba, que ha vivido una temporada de pesadilla, muy mermado por sus problemas de rodilla. El base de 31 años, número 9 del draft en 2011, llevaba dos años en Boston después de ocho en Charlotte. Ha sido cuatro veces all star, y todavía en 2019 entró en el Tercer Quinteto de la temporada. Pero en este curso, muy duro para los Celtics, comenzó lesionado, tardó mucho en coger ritmo y nunca pareció cómodo ni importante en un equipo que cuenta con Jayson Tatum y Jaylen Brown. Según varios periodistas estadounidenses, su relación con los Celtics estaba en muy mal momento después de que se filtraran los intentos de los verdes de traspasar a un base que llegó como estrella y esperanza tras la fuga de Kyrie Irving. Tampoco ha echado raíces en una franquicia en la que Brad Stevens hace un primer movimiento sonado desde que dejó el banquillo y pasó a mandar en los despachos. Todavía no hay entrenador que ocupe su lugar.

Los Celtics recuperan a Horford, que acaba de cumplir 35 años y que jugó a gran nivel en Boston entre 2016 y 2019 (allí logró su quinta y última elección para un All Star). El pívot dominicano recuperó tono en los Thunder después de un pésimo año en los Sixers. Eso sí, en marzo dejó de jugar mientras su equipo se centraba en dar minutos a los jóvenes, uno de ellos Moses Brown, que ahora se va a los Celtics, contra los que cogió 19 rebotes solo en la primera parte en un duelo en marzo. Con 21 años, es un jugador interesante que ha promediado esta temporada más de 8 puntos y 8 rebotes por partido. ´

Los Celtics hacen una operación con sabor a derrota (terminar su relación con Kemba, soltar una primera ronda para hacerlo…) pero refuerza la posición de pívot, un dolor de muelas, se obligan a nuevos movimientos en el backcourt y ganan flexibilidad económica pensando, sobre todo, en el verano de 2022. Horford tiene firmados (por los Sixers...) 27 millones la próxima campaña y 26,5 la 2022-23, si bien solo 14,5 están totalmente garantizados.

¿Y los Thunder? Siguen acumulando activos. Sam Presti (amigo íntimo de Stevens, por cierto), suma y sigue: se desprende de Horford, suma una primera ronda más en el próximo draft y a un Kemba al que puede traspasar otra vez o intentar recuperar y revalorizar, algo que ya ha hecho con el propio Horford y con Chris Paul, que hizo en OKC parada entre Houston y Phoenix. Los Thunder tienen tres primeras y tres segundas elecciones en el próximo draft, la primera suya se proyecta como número 4, a la espera de la lotería, y podrían tener la de los Rockets si cae al número 5.

Un botín tremendo que crece al ritmo de jugadores como Horford, que ahora deja premio después de haber llegado también con los bolsillos llenos: para quitarle un problema a los Sixers, aceptó al pívot antes del inicio de esta temporada con los derechos de Vasilije Micic y una primera ronda con la que fue elegido (número 34) el base Theo Maledon. En esa operación fueron a Philadelphia Danny Green (que Presti había captado al enviar a Schröder a los Lakers), Terrance Ferguson y Vicent Poirier, ahora jugador del Real Madrid. Así se mueve Presti: traspasó a Carmelo Anthony y una primera por Schröder, a Schröder por otra primera y Danny Green, a Danny Green por una primera y Horford y ahora a Horford por una primera y Kemba Walker. Pick a pick a sumando para la reconstrucción de OKC Thunder.