Debut de pesadilla de Fournier y desastre absoluto de los Raptors
Los Celtics vuelven a las andadas y los Raptors se hunden sin remisión en un Este que es un galimatías y en el que Jimmy Butler rescató a los Heat en el Madison Square Garden.
El público volvió al Garden 55 semanas después. 2.298 personas, un 12% de la capacidad total del pabellón, asistieron a algo parecido a la experiencia total Celtics 2020-21: buenos tramos, pésimos tramos, líos, altibajos, hundimientos, remontadas… y derrota final (109-115), esta vez contra unos Pelicans que están aprendiendo a no perder partidos igualados, su gran cruz. Y que están a tiempo de no desperdiciar del todo su temporada. En 21-25 pero con cuatro triunfos en cinco partidos, son duodécimos del Oeste pero están a un partido y medio del décimo del Oeste, una zona de play in que persiguen junto a los Kings, también al alza.
Los Celtics, en su temporada de diván de psiquiatra, están 23-24, ahora séptimos en un Este en el que nada es lo que parece (o todo lo contrario) más allá de Sixers, Nets y Bucks: hay seis equipos entre el 23-22 de los Hornets y el 21-24 de los Pacers. Seis en dos partidos. Los Celtics, en fin, siguen en negativo después de regresar el 50% de victorias con dos seguidas. De vuelta a casa, perdieron una buena ocasión de acumular optimismo en otro partido en términos generales malos, en el que los buenos momentos no superaron a los muy cuestionables. Y en el que Marcus Smart volvió a ser el corazón, y las pulsaciones, de su equipo para lo bueno y para lo malo. Fallón, inestable y finalmente expulsado, también el más rebelde frente a la adversidad y el espíritu en un par de reacciones inconexas en la segunda parte.
La segunda casi propicia una remontada explosiva: de 89-105 a cinco minutos del final a 107-110 en el último minuto. Jayson Tatum anotó ahí 12 de sus 34 puntos (con 9 rebotes y 5 asistencias), pero los Celtics se quedaron a una defensa de tener bola para el milagro. Brandon Ingram (25 puntos, 9 asistencias) metió un canastón pisando con los talones la línea de triple (107-112 a falta de 33 segundos) y Tatum falló después. El resto fueron, con la expulsión de Smart, tiros libres del propio Ingram y un Zion que acabó con 28 puntos, 8 rebotes y 4 robos. Y que lleva 24 partidos con al menos 20 puntos y un 50% en tiros. A uno del récord (25) de Shaquille O’Neal, el tope desde que existe el reloj de tiro (1954-55).
Además, Josh Hart jugó uno de esos partidos tan suyos (15 puntos, 15 rebotes), valiosísimo para unos Pelicans que siguen sin Lonzo Ball pero que se han estabilizado con Alexander-Walker formando backcourt con Bledsoe (30 puntos entre los dos). Enfrente, y sin Jaylen Brown, una tremenda irregularidad a la que colaboró el pésimo debut de Evan Fournier, que esquivó una ausencia larga por protocolos sanitarios (falso positivo) y se estrenó en Boston con 0 puntos y un 0/10 en tiros en 33 minutos. Sumó dos rebotes, no dio asistencias y se le salieron hasta canastas fáciles. Nunca en la historia de los Celtics desde que hay línea de tres (1980), un jugador había disputado tantos minutos y tirado tanto a canasta sin anotar. Fournier es un buen anotador, un jugador que aportará puntos desde la segunda unidad. Esta noche de pesadilla quedará como anécdota para él. Pero el problema, el verdadero problema, es que no parece que Danny Ainge haya hecho realmente los deberes en el cierre de mercado para un equipo que, entre días buenos y horribles, nunca parece cerca de los mejores del Este. Y esa era su obligación como finalista de Conferencia.
N. YORK KNICKS 88-MIAMI HEAT 98
Como en los viejos tiempos. En los 90, los Knicks-Heat fueron sinónimo de defensa, siderurgia, golpes, músculo y una rivalidad encarnizada en playoffs. Casi como si revivieran esos viejos tiempos, el duelo del Madison se resolvió en una agotadora lucha, posesión a posesión, en la que decidió el descorche de los visitantes en el tercer cuarto (21-39 con 14 puntos de Jimmy Butler. 3-0 en la temporada para los Heat (tres partidos en los que la máxima anotación ha sido 109 puntos) y dos equipos en pleno atasco del Este, 24-23 los Knicks (que llevaban tres victorias seguidas) y 23-24 los Heat, que rompieron una terrible racha de seis derrotas.
Al descanso, las cosas pintaban mal para los de Spoelstra, que llevaban 36 puntos (43-36) con 14 canastas por 6 pérdidas, un 33% en tiros totales y un 21% en triples. Pero aparecieron Butler (al final 27+5+6), Adebayo (20+17+4) y un Tyler Herro que rompió su pésima racha en tiros (18 puntos), y que sumó junto a Duncan Robinson un 8/18 en triples esencial en un partido de tan poca anotación. Los Knicks trataron de levantarse de la lona (78-86 mediado el último cuarto), pero no tuvieron puntería. Los 22 puntos de Julius Randle fueron casi la mitad e los 46 que sumó todo el quinteto titular (8 con 12 tiros de RJ Barrett), rescatado por la aportación desde el banquillo de Derrick Rose (16 puntos) y Quickley (12).
DETROIT PISTONS 118-TORONTO RAPTORS 104
De ese batiburrillo del Este se siguen cayendo los Raptors, a los que la debilidad de la Conferencia sigue dando vidas extra que, francamente, no están mereciendo. Después de perder (118-104) por tercera vez en marzo contra los Pistons (3-0 la serie de la temporada) los de Nick Nurse enlazan doce derrotas en trece partidos y están 18-29. A once del 50% pero a solo dos del décimo puesto, de los Bulls, que da acceso al play in.
Los Pistons llevan trece victorias (13-33) y tres las han sumado contra los canadienses, que dieron una imagen calamitosa, con desventajas de más de 20 puntos en la primera parte y de 23 en la segunda. Kyle Lowry jugó mermado (lesión en un pie), Fred VanVleet empezó bien pero se desesperó, Siakam tuvo una noche horrible con muchos problemas de faltas, Anunoby se vio forzado a intentar cosas que no le corresponden en ataque y Boucher sigue con su regresión tras su excelente inicio de temporada. Como casi siempre, los Raptors echaron en falta una referencia interior y más producción del banquillo: 65-25 para los reservas de los Pistons, con 14 puntos de Stewart, 12 de Jackson, 19 y 10 rebotes de Diallo, 17+4+5 de Joseph…
Los Raptors estaban 16-15 el 22 de febrero. Después entre lesiones, protocolos sanitarios y líos con el cierre de mercado, ha llegado el descalabro. Incapaces siquiera de competir contra unos Pistons sin la mejor versión de Grant (7 puntos) y liderados por dos rookies, el brillante Saddiq Bey (19 puntos, 5 triples) y un Saben Lee que pide paso y que en su segundo partido como titular firmó una gran primera parte y acabó con 19 puntos y 5 asistencias.