Que Jayson Tatum es una estrella de la NBA es un hecho. Pero, por si quedaba alguna duda, él se encarga de despejarla cada vez que puede. Y ante los Clippers, sin Jaylen Brown ni Marcus Smart (lesiones y más lesiones), se encargó de demostrarlo por enésima vez: 34 puntos, 7 rebotes, 2 asistencias y 4 robos, tirando mucho (27 tiros con 12 aciertos), extraordinario en el triple (5 de 10) y con una segunda parte para enmarcar (19 tantos de sus 34 llegaron ahí). Y la extraordinaria actuación cobra una especial importancia cuando vemos a quién tenía enfrente. No al rival colectivo, que también (los Clippers, claro), sino a su emparejamiento en pista, un Kawhi Leonard en una de las mejores versiones de su carrera (aunque se hable poco de ello), que además se fue a 28 puntos (0 de 5 en triples, ojo con eso), 11 rebotes y 5 asistencias. Un líder que también jugó sin lugarteniente (Paul George también es baja) y que fue el mejor de los suyos, pero que no pudo frenar a una estrella que ya es presente y no emergente, una de las referencias actuales de la mejor Liga del mundo en la que es solo su cuarta temporada como profesional y sin haber cumplido todavía los 23 años. Impresionante.

Y eso que los Clippers empezaron volando: 33-21 para empezar, con un +12 de Kawhi en los primeros 12 minutos, que jugó completos, y con los locales lanzando con un 60% en tiros de campo y un 50% en triples. Mantener ese nivel de acierto es sencillamente imposible, pero la ventaja era cómoda al descanso (62-51) y no fue hasta el tercer periodo cuando despertaron los Celtics: 38-20 de parcial, 8 de 11 en triples en la ofensiva y apenas 6 tiros de campo conseguidos por sus rivales... en 21 intentos. A menos de 5 minutos para la conclusión del periodo, un triple frontal de Gran Williams le daba a los visitantes la primera ventaja del partido (73-74). Tatum anotó 12 puntos en ese cuarto, por 8 de un Kawhi que, sin embargo, sólo anotó un tiro de campo (6 de 6 desde la personal). De repente, el equipo de Tyronn Lue había perdido su ventaja y empezaba un partido nuevo con los verdes en una peligrosa dinámica ascendente y los Clippers apocados en ataque, sin respuesta ante la avalancha que representaban sus rivales y con dudas para gestionar unos minutos finales que Boston hizo suyos.

Y eso que partido hubo todo el rato. Un triple desde la esquina de Marcu Morris (13 puntos) empataba el partido a 102 con menos de cinco minutos para el final. Un gancho de Serge Ibaka (7+7+2) en la zona volvía a poner la igualdad, esta vez a 104. Kawhi daba ventajas de dos puntos a los suyos (108-106, con tres minutos para el final) y de uno, dentro del último minuto, con una asistencia yendo hacia línea de fondo para que Lou Williams (18 puntos y 6 asistencias, esta vez bien) anotara desde la misma esquina de la que había hecho gala de un acierto tremendo Marcus Morris momentos antes. Con 112-111, los angelinos estuvieron a punto de recuperar, pero los Celtics reaccionaron volviendo a robar. Tras ese momento de duda, un tiro en suspensión de Kemba daría una ventaja a los Celtics que ya no perderían. Y sería el propio Kemba el que resolvería desde la personal tras un postrero triple de Lou Williams que le daba algo de emoción al asunto (117-15) con apenas un puñado de segundos para el final.

Los Celtics van y vienen, pero consiguen una victoria de mucho mérito ante uno de los aspirantes al título. Desde el retorno de Tatum, que se perdió cinco partidos, el alero ha hecho 24, 25, 30, 27, 27 y 34 puntos, mientras que Boston se va con 3-3 de estos duelos, una cifra insuficiente para un equipo lleno de bajas y que no termina de arrancar, pero que se va de Los Angeles con una inyección de moral antes de visitar Phoenix y Salt Lake City y terminar esta mini gira de cinco partidos por el Oeste y volver a su Conferencia, de la que ahora mismo ocupan el cuarto lugar (12-9). Y con Kemba, que ha anotado 24 puntos, ligeramente recuperado de sus constantes problemas en el tiro. Los Clippers, que además de a George no tienen disponible a Patrick Beverley, se quedan 17-7 y pierden el segundo puesto del Oeste, que pasan a ocupar los Lakers. Pero resisten en la parte más alta de la NBA y tienen victorias de sobra mientras esperan el retorno de sus bajas. Y Kawhi, por cierto, sigue en modo estelar, promedia más de 26 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias por partido y está ejerciendo de líder sin dos de los compañeros que más peso tienen en el vestuario. Los Clippers pierden ante Boston... pero ojo. Que están en uno de los mejores momentos de su historia. Algo que, si atendemos a la misma, tampoco es muy complicado.