Sigue la pesadilla de Ricky Rubio y unos Timberwolves hundidos

Dijo Stan Van Gundy, después de lo que por ahora es el gran partido de los Pelicans en esta temporada, que durante muchos minutos vio lo que realmente quiere que sea su equipo. Puede sonar ventajista, porque fue el día en el que salió todo, pero es obvio que así debe ser. Y que después de una racha nefasta de una victoria en nueve partidos, los de Louisiana por fin han ganado dos seguidos. Y ojo, una cosa es superar a los paupérrimos Wizards y otra muy distinta imponerse, con tramos de aplastamiento, a los mismísimos Bucks (131-126 final). Y claro, como en esta temporada casi todo el mundo pierde con casi todo el mundo, los Pelicans están solo a dos victorias del octavo puesto del octavo puesto de un Oeste en el que muchos motores van al ralentí. Y es año de play in, así que hasta esas fronteras están difuminadas…

En efecto: en la primera parte, los Pelicans jugaron todo lo bien que pueden jugar, el reverso del equipo desmotivado, plano en ataque y poroso en defensa que han sido durante casi todo este primer tramo de temporada. Al descanso ganaban 68-45, y avanzado el tercer cuarto estaban 93-65, justo antes de una reacción furiosa de los Bucks, que enlazaron un 3-20 en apenas tres minutos y llevaron a estar 98-89. Pero los de Van Gundy anotaron los últimos cinco puntos (103-89 al final del tercer cuarto), incluida la secuencia que demostró a los Bucks que no era su noche: Giannis falló alley-oop, Melli anotó un triple desde la esquina. Los de Budenholzer metieron 81 puntos en la segunda parte y perdieron, el primer equipo al que le pasa algo así desde 1979.

Van Gundy contó con Melli porque dejó fuera de la rotación a JJ Redick. Sin él, un especialista en horas bajas, los Pelicans igualaron su récord de triples: 21 (21/48) por los 13 (13/35) de los Bucks, que sufrieron la conversión de Lonzo Ball y Eric Bledsoe en Stephen Curry y Klay Thompson: Lonzo metió siete triples (igualó el tope de su carrera) con un brillante 7/13). Bledsoe, venganza contra sus ex, pasó de 6 (7/14) por primera vez desde 2018. Esa puntería abrió nuevas opciones en ataque para los Pelicans, con Steven Adams gigante en las zonas (20 rebotes) y Zion Williamson en su mejor noche como facilitador: 21 puntos, 9 rebotes y, ojo, 7 asistencias. Brandon Ingram metió 28 puntos para un equipo que quizá esté despertando a tiempo. O que simplemente vivió de una pésima primera parte de un rival dormido, que juega hoy en back to back en Charlotte y que, aún así, se exprimió en la segunda parte buscando la remontada. Giannis Antetokounmpo llevaba 9 puntos al descanso y acabó con 38, 11 rebotes y 5 asistencias. Khirs Middleton acabó en 16+8+8 para unos Bucks que perdieron completamente el hilo durante muchos tramos de una nefasta primera mitad.

RAPTORS 124-KINGS 126

Los Kings también reaccionan. Como los Pelicans, un cadáver hace unos días en el Oeste, los californianos están en pleno viraje: tres victorias seguidas y tono muy competitivo (8-10 ahora) después de ganar con mucho mérito y apuros finales a unos Raptors que vuelven a torcerse: 7-12 con tres derrotas después de haber ganado cinco partidos de seis.

Los Kings metieron el 55% de sus tiros y mandaron en un brillante primer tiempo al que siguió un final de mucho sufrimiento. La defensa de los Raptors forzó 9 pérdidas en un último cuarto en el que el partido pasó de un 105-112 a un 116-117. Solo Harrison Barnes (26 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias) mantenía flote a los Kings hasta que apareció el excelente rookie Ty Haliburton, que después de fallar seis triples anotó el séptimo, a 44 segundos del final y para poner el 116-120. Después los Kings metieron los tiros libres necesarios. Haliburton acabó con 10 puntos, 6 rebotes y 11 asistencias, Fox con 24 puntos y 4 asistencias, Hield con 22 puntos y 5 triples y Whiteside sumó 16 puntos y 9 rebotes desde el banquillo. En los Raptors, 32 puntos y 4 rebotes de Siakam, 17 y 6 asistencias de Lowry y 26+5+6 de VanVleet. Pero las cosas no terminan de funcionar.

HORNETS 108-PACERS 105

Otro partido en el que hubo sorpresa fue en el Hornets-Pacers, el segundo duelo entre ambos equipos en tres días y distinto signo esta vez, con un muy buen triunfo de los de Carolina, que rondan el nivel playoffs en su mejor versión. Y que sobrevivieron a una carga final de los Pacers, que remontaron nueve puntos en el último y se pusieron por delante. Entonces les salió cruz el juego de triples. Uno de Lamb les puso por delante (102-103) a 90 segundos del final y entonces anotaron dos Rozier y Graham (108-103). Malcolm Brogdon (21 puntos, 8 asistencias) anotó (108-105) y, tras pérdida, de los Hornets, tuvo el triple para empatar en el último ataque, pero falló.

Domantas Sabonis acabó con 22 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias, Myles Turner anotó 20 puntos y capturó 8 rebotes pero los Hornets fueron más equipo: 14 puntos y 10 asistencias de Graham, 19 puntos de Rozier (9/17 en triples entre los dos), 16+6+7 de LaMelo Ball (0/6 en triples), un poco de todo de Gordon Hayward (11+8+6) y un partidazo de PJ Washington (19+9+3), un jugador clave, por su potencial, en el crecimiento de estos Hornets.

WIZARDS 100-HAWKS 116

El peor equipo de la Liga, los Wizards (3-12 ahora) volvió a perder de forma incontestable, cada vez más descosido. Son cuatro derrotas seguidas desde su parón por la COVID y un reagrupamiento progresivo: volvieron Hachimura, Bertans (0 puntos, 0/6 en triples) y Wagner pero siguen fuera Ish Smith, Troy Brown y Avdija. Los Hawks (10-9 ahora) sacaron tajada: +23 en el tercer cuarto y control del intento de remontada local en el último parcial, en el que Trae Young sumó, por si acaso, 18 de sus 41 puntos (con 5 asistencias y un 5/9 en triples).

Fue un partido feo, de nervios, técnicas (9) y tres expulsiones, entre ellas las de Rajon Rondo y Russell Westbrook (26+6+4), que se pasaron la noche a la gresca. Los Hawks controlaron a Bradley Beal, que jugó uno de los peores partidos de la temporada y se quedó en 26 puntos con un 0/8 en triples. No hay ninguna luz en el horizonte para estos Wizards.

KNICKS 102-CAVALIERS 81

Dos revelaciones (cada uno a su manera del Este), jugaron en Nueva York, donde la defensa de los Knicks congeló a Collin Sexton (17 puntos en 18 tiros) y dejó muy solo a Darius Garland (24 puntos, 4/6 en triples) en un día demasiado discreto de Andre Drummond (4), Taurean Prince y Larry Nance y en el que aportó lo que pudo Jarrett Allen (15 puntos, 9 rebotes, 3 asistencias). Los Knicks contaron con la producción del que es su núcleo duro en esta por ahora meritoria temporada: 16 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias de Julius Randle, 24 puntos de RJ Barrett y 25 con 5 rebotes y 5/8 en triples de Immanuel Quickley.

MAGIC 90-CLIPPERS 116

Partido sin mucha historia entre unos Magic muy mermados (8-12 ya) y unos Clippers a toda máquina (15-5), cada vez más sólidos y con un aspecto más amenazador. Después del 26-26 del primer cuarto, los locales solo metieron 64 puntos más. En la segunda parte abrieron con un parcial de 11-0 para ponerse a tres… pero perdieron 11-28 el resto de ese tercer cuarto. Así, imposible romper su racha negra contra los Clippers, a los que no ganan desde noviembre de 2013 (14 derrotas seguidas). Solo Terrence Ross (24 puntos) estuvo a buen nivel. Vucevic se quedó en 10 puntos y 6 rebotes con un 4/13 en tiros, Fournier en 8 puntos con 13 tiros, Anthony en 6 puntos con 10 tiros… un desastre. En los Clippers, gran partido y descanso final para Kawhi Leonard (24 puntos) y Paul George (26+9+5), bien acompañados por Serge Ibaka, Reggie Jackson y Marcus Morris.

TIMBERWOLVES 94-SIXERS 118

No hubo sorpresa: el Wolves-Sixers fue exactamente lo que parecía que iba a ser. Los Sixers, uno de los mejores equipos de la NBA, siguen sin perder con su quinteto tipo (11-0 ahora, 14-6 total), los Wolves siguen acumulando derrotas (4-14). No se podía esperar una hazaña de los Wolves, que recibían a Joel Embiid, que va a ritmo de MVP, sin Karl-Anthony Towns, que sigue de baja por COVID ni Naz Reid. Sin pívot puro enfrente, Embiid jugó a sus anchas: en 27 minutos sumó 37 puntos y 11 rebotes, acompañado por Ben Simmons (11 puntos, 7 asistencias), Seth Curry (2 puntos), Shake Milton (13)…

Los Wolves capearon el primer tiempo (48-53) y se hundieron en el segundo (46-65). Fue titular Anthony Edwards, el número 1 del draft que sumó 15 puntos con un 5/13 en tiros. Regresó D’Angelo Russell con unos desangelados 14 puntos (1/7 en triples, solo 4 asistencias) y Beasley anotó 22 puntos en otra noche en la que Ricky Rubio no pudo salir del laberinto en el que él mismo ha asumido que se encuentra: 4 puntos y 4 asistencias con un 2/6 en tiros y 4 pérdidas de balón para el base de El Masnou.