Cinco asuntos pendientes: Davis, Giannis, Harden, los Clippers...
Ha pasado el draft y se ha repartido casi todo el mercado de agentes libres... pero en la NBA quedan temas pendientes que pueden transformar el panorama de la nueva temporada.
Mañana abren los training camp y arranca oficialmente la pretemporada 2020 de la NBA. Solo unos días después del draft y la locura del mercado de agentes libres y con la vista puesta en una Regular Season 2020-21 que comienza el día 22 y que se jugará con el reto de convivir con la pandemia sin la seguridad del formato burbuja con el que se cerró la pasada temporada, en Florida.
Han cambiado entrenadores, ha habido traspasos y fichajes sonados. Y las plantillas son en general las que arrancarán curso… pero quedan todavía asuntos por resolver, cuestiones muy importantes que quedan pendientes y que pueden cambiar el panorama de la temporada de forma muy importante. Drástica, en algunos casos.
Estos son los cinco asuntos pendientes de la NBA en el arranque de la pretemporada:
EL FUTURO DE GIANNIS ANTETOKOUNMPO
Pasan los días y Giannis sigue deshojando la margarita. El futuro de los Bucks, y el de la NBA, depende en gran parte de la decisión del alero griego, MVP de las dos últimas temporadas y que por ahora no firma su extensión súper máxima en Wisconsin. Los Bucks pueden darle 221 millones por cinco temporadas. El plazo para firmar esa súper máxima es el 21 de diciembre. Si para esa fecha no hay acuerdo, Giannis será agente libre sin restricciones el próximo verano. Y arrancará solo un día después una temporada que los Bucks vivirán con los nervios a flor de piel.
Antetokounmpo ha dejado claro que seguir en los Bucks, el equipo que lo drafteó en 2013, es su primera opción. Pero también que su amor no es incondicional y que quiere tener la certeza de que en Milwaukee podrá pelear todos los años por el anillo. El fichaje de Jrue Holiday (a precio de oro: Bledsoe, Hill, tres primeras rondas y el derecho a intercambiar otras dos) es una invitación para el optimismo… pero el fracaso en el fallido sign and trade por Bogdan Bogdanovic (un jugador al que quería a su lado el MVP) un síntoma preocupante. Si Giannis no firma en las próximas tres semanas, se desatarán los rumores, las cábala y las cuentas. Sobre todo en Dallas, Miami, Toronto… y hasta Los Ángeles. Y zozobrará el proyecto de los Bucks, que lleva dos Regular Season rugiendo como un león y dos playoffs maullando como un gatito.
EL NUEVO CONTRATO DE ANTHONY DAVIS
Anthony Davis, estaba cantado, rechazó su player option de 28,7 millones de dólares y se convirtió en agente libre. Su agente, Rich Paul (mano derecha de LeBron James) ya afirmó que la rúbrica de un nuevo acuerdo se retrasaría… y así sigue la cosa. Nadie duda de que Davis seguirá en los Lakers, donde tratará de revalidar título tras una temporada de ensueño al lado de LeBron. Pero el tema es por cuántos años se va a comprometer un Davis que tiene todas las opciones abiertas. Y de cuya decisión depende la estabilidad del proyecto de los Lakers.
Davis puede firmar por dos años en formato 1+1 (y unos 68 millones de dólares). Esto le permitiría ser agente libre después de esta temporada, en un mercado de 2021 que va a ser una locura porque va a haber muchas súper estrellas. Él, en este caso, y LeBron (que firmó 3+1 y afronta su tercera temporada) podrían optar por salir juntos a la agencia libre. Un asunto peliagudo para los Lakers, seguramente. También puede firmar por 3 años, en 2+1 (player option para la tercera) y unos 106 millones. Estratégicamente, es otra opción viable: después de dos años, Davis llevará diez en la NBA, tiempo que le permitirá ya optar al súper máximo por el 35% del salary cap. Algo parecido a lo que hizo Kawhi Leonard con su último contrato. Finalmente, y será una opción óptima para los Lakers, Davis podría firmar por cuatro años (146 millones) o, la baza lógica si va al largo plazo, cinco y unos 190 millones. Así tendría garantizado su súper contrato y evitaría riesgos como el de su amigo DeMarcus Cousins, que ha enlazado lesiones graves desde que iba a firmar una gran extensión y se ha quedado desde entonces sin ella y con contratos marginales (Warriors, Lakers, Rockets...).
EL POLVORÍN DE HOUSTON ROCKETS
Russell Westbrook y James Harden siguen en Houston Rockets. Ninguno de los dos quiere estar ya allí. El base echa de menos la posición de macho alfa que tenía en los Thunder, el escolta considera que ya ha agotado un ciclo (de ocho años) y que haría mejor en salir a la vez que Daryl Morey y Mike D’Antoni. Pero los Rockets, por ahora, no tienen prisa: ni hay mercado por un Westbrook venido a menos y con un contrato horrendo (más de 132 millones por cobrar en tres temporadas), ni las ofertas por Harden son lo suficientemente importantes para que se hayan planteado realmente la salida de uno de los grandes anotadores de la historia de la NBA.
Es una bomba de relojería tener a ambos con mala cara y a las órdenes de un técnico verde en esas tesituras como el recién llegado Stephen Silas. En cierto modo, a los Rockets podría no quedarles más remedio que entrar en reconstrucción total. Eso provocaría un terremoto con las salidas de Westbrook y sobre todo Harden (que quiere y reunirse en Brooklyn con Kyrie Irving y Kevin Durant); pero también con otros pequeños movimientos que podrían producirse: Danuel House, PJ Tucker… por otro lado, los Rockets se han hecho con el interesantísimo Christian Wood y van a ver qué queda dentro de DeMarcus Cousins. Si sale bien, ¿podrían sus dos estrellas coger impulso para un último intento en Texas?
¿UN GRAN MOVIMIENTO DE LOS CLIPPERS?
Cuidado con los Clippers. La temporada pasada, en la que partían como el gran favorito al anillo tras la llegada de Kawhi Leonard y Paul George, acabó con fracaso estrepitoso en los playoffs de la burbuja, donde se dejaron remontaron un 3-1 por Denver Nuggets y no pudieron meterse en la final del Oeste por primera vez en su historia. Para colmo, los Lakers (a los que habían adelantado para fichar a Kawhi) se proclamaron campeones. Doc Rivers salió despedido tras el patinazo y tanto Kawhi Leonard como George tienen player options para la temporada 2021-22. Es decir, pueden ser agentes libres el próximo verano si así lo desean.
Así que los Clippers son otra de las franquicias que arrancan con mucha presión la temporada. Si las cosas no van bien desde el principio, se acumularán los rumores sobre el futuro de sus estrellas. Los angelinos hicieron una de las grandes adquisiciones de la agencia libre con la llegada de Serge Ibaka, sobrepagaron a Marcus Morris y se harán con Nico Batum de oferta. Pero también se han quedado sin Harrell y JaMychal Green en su rotación interior. Falta algo, y desde luego el hueco parece estar en el puesto de base, un lastre durante toda la temporada pasada. Los Clippers necesitan dirección y creación, y ya se ha filtrado que jugadores como Lou Williams están en el mercado. ¿Harán un último gran movimiento, en principio para llevarse a un base? Hay unos cuantos general managers que creen que así va a ser…
¿OTROS TRASPASOS? WALL, BEAL, BLAKE GRIFFIN…
Hay más operaciones que pueden sacudir los últimos días previos al inicio de la Regular Season. Los Pistons, que avanzan ya de forma descarada hacia la reconstrucción, no tienen mucha necesidad de retener a un Blake Griffin que podría ser muy útil para un aspirante… que pueda hacer hueco a su contrato y que confíe en que su rodilla está en condiciones. En Washington, mientras, hay marejada: el veterano periodista David Aldridge asegura que John Wall y Bradley Beal no quieren jugar juntos. Y aunque la franquicia lo niega, Wall no ha desmentido que haya pedido ser traspasado. Con otro contrato terrible (casi 133 millones entre esta inminente temporada y las dos siguientes) y después de dos años de pesadilla con las lesiones, Wall tiene poco valor de mercado salvo que demuestre que puede seguir siendo el base supersónico que fue. Distinto es el caso de Beal: un escolta en un plenitud y un anotador excepcional, varios equipos importantes han preguntado por él pero los Wizards siempre han insistido en que no lo traspasarán bajo ningún concepto. Pero en la NBA, ya se sabe, todo cambia de la noche a la mañana…