Sigue el enredo en torno al futuro de Houston Rockets, una franquicia que se ha visto en todos los charcos e inmersa en un drástico cambio de ciclo que comenzó con la salida de Daryl Morey (de los despachos) y Mike D’Antoni (del banquillo) y puede alcanzar su nivel más profundo si, como es el deseo de ambas estrellas, cambian de aires tanto Russell Westbrook como James Harden.

La situación es muy distinta en ambos casos. Westbrook y Harden, que apretaron para formalizar su reunión en Texas (ya habían jugado juntos en OKC) no quieren seguir juntos después de una temporada que acabó mal, con una paliza (4-1) de los Lakers en semifinales del Oeste. Westbrook no estuvo cómodo a la sombra de Harden después de ser el rey sol en los Thunder tras la salida de Kevin Durant, en 2016. Y Harden parece haber agotado su ánimo de ser campeón en Houston, donde llegó en 2012 y donde se ha convertido en un candidato perenne al anillo pero todavía no ha jugado ni una Final de la NBA. La salida de Morey y D’Antoni, que crearon el sistema para sacar lo mejor de él, habría sido el detonante para que La Barba pida el traspaso. Los Rockets ven ambos casos de forma opuesta: querrían retener a Harden y ven con buenos ojos la salida de Westbrook.

Harden tiene intención de seguir apretando para irse a Brooklyn Nets con Kyrie Irving y Kevin Durant. Los Rockets, que no quieren regalar a su gran activo, transmiten que no tienen prisa por cerrar ninguna operación, que no tendrían problema en comenzar el curso con sus dos estrellas enfadadas y que necesitarían una oferta históricamente alta para despedirse de su jugador franquicia. Y en eso están los Nets, que están más que dispuestos a hacerla. Con Westbrook todo es más confuso porque apenas hay mercado para un jugador venido a menos más allá de las estadísticas: solo New York Knicks y Charlotte Hornets, dos equipos muy lejos de ser competitivos, han mostrado interés por él, y lo han hecho además de forma discreta y sin ganas de perder la cabeza en su propuesta. Los Hornets esperan al draft: si pueden elegir a Lamelo Ball con su número 3, podrían perder todo interés en Westbrook.

En esas están los Rockets cuando ha surgido una información muy sorprendente. Shams Charania, uno de los periodistas más fiables del entorno NBA, asegura que ha habido conversaciones entre Rockets y Washington Wizards para un posible intercambio Russell Westbrook-John Wall. Por ahora solo han sido eso, contactos, pero es una opción llamativa que necesitaría que los Wizards pongan más en la operación, ya que en teoría son los más interesados en deshacerse del terrible contrato de John Wall. El base, que está a punto de volver tras un martirio con las lesiones, cobrará 41,2 millones esta temporada 2020-21, 44,3 la próxima y tiene una player option de 47,2 para la 2022-23. Westbrook está en números similares: 41,3, 44,2 y player option de 47. Pero, con todo lo que haya podido bajar su cotización, es una opción teóricamente más atractiva, por lo que los Rockets intentarían sacar algo de tajada. No parece fácil, visto como se está moviendo el mercado.