PLAYOFFS NBA | CELTICS 101 - HEAT 106 (0-2)
Dragic y Adebayo lideran la remontada y encarrilan la serie
Los de Spoelstra caían por 13 puntos al descanso, sin embargo un gran tercer cuarto cambió de nuevo el signo del partido. Se colocan a dos partidos de las Finales seis años después.
Miami sigue soñando despierto. 0-2 y las Finales a dos partidos seis temporadas después. Los de Spoelstra supieron rehacerse de un mal segundo cuarto y firmaron una fulgurante reacción en el tercero, el cual sentó las bases de un segundo triunfo que terminó adquiriendo de nuevo tintes de proeza. El partido arrancó con un primer parcial en el que ambos equipos encadenaron buenas rachas de tiro, pero Boston hizo prevalecer el status de grandes tiradores de muchos de los jugadores de su roster y terminó acabando el cuarto por delante.
Unos primeros 12 minutos en los que las defensas dejaron mucho que desear. Boston continuó con su tradicional defensa zonal encubierta con constantes intercambios de marcaje, mientras que Miami apostó de nuevo por ese 2-3 zonal que en el arranque fracasó pero que en el tercer parcial brilló. Smart, Tatum y los primeros signos de brillantez de Walker desde el perímetro en la serie sostuvieron en ataque a los de Stevens, que acabaron con un gran 66,7% de tiros de campo en el arranque.
En Miami, apenas se asomó con buenos números un Robinson que se reivindicó tras su deficiente partido inaugural. 12 de los 28 puntos de los de Spoelstra corrieron de su cargo y los Heat se mantuvieron con opciones en el marcador, pero la realidad es que su juego empezaba a dejar algunas dudas. El segundo cuarto confirmó los malos presagios. Stevens encontró por fin al mejor Kemba y Miami empezaba a tambalearse en defensa. Al gran juego exterior de sobra demostrado en Boston, apareció la variante del juego interior.
Brad probó con alternativas de su roster como Langford, que apenas duró un minuto y medio, o Kanter, el cual terminó firmando mejores números que Theis y aportando mayor fluidez y sentido a la circulación de balón durante el transcurso del segundo parcial. Spoelstra llegó a cambiar el sistema defensivo al hombre pero el equipo hacía aguas por todos lados. Ni Adebayo ni Dragic ni Butler. En ataque el nombre del segundo parcial en los de Florida fue Herro, que pese a ser un de sobra ya demostrado triplista explotó la inteligencia en el rebote y los buenos movimientos en la pintura para sostener a su equipo en ataque. 13 abajo y Miami se temía lo peor.
Sin embargo, el segundo capítulo de la final del Este tenía guardado un segundo giro. Miami firmó un soberbio 37-17 en el tercer parcial y acababa el cuarto con 7 puntos de renta. Butler, Crowder y Adebayo lideraron y sostuvieron al equipo en defensa, que volvía a ser zonal después del infructuoso intento de cambiar de planes en el segundo cuarto, y con la base sólida en defensa los de Spoelstra encontraron la brillantez en ataque.
Bam con 15 puntos explotó de nuevo su capacidad de base encubierta, aportando mayor fluidez en la circulación de balón, y explotó su capacidad anotadora con grandes penetraciones. A él se le sumó en ataque de nuevo el director de orquesta esloveno. Goran Dragic recuperó el pulso al partido antes de ser decisivo en los últimos 12 minutos. El esloveno terminó la primera parte con 9 puntos y concluyó el duelo con 25, además de 3 rebotes y 5 asistencias, todo un indicativo de su importancia en el juego ofensivo de Miami.
El último parcial arrancó como terminó la primera parte. Boston volvía a acercarse en el marcador, a desplegarse en defensa y a encontrar a alguno de sus tiradores enrachados. Walker y sobre todo Brown lideraron la reacción de los de Stevens, que pasaron de estar siete puntos abajo en el marcador a empatar el partido a poco más de cinco minutos para el final del duelo.
Cuando parecía todo torcerse de nuevo para los intereses de los de Spoelstra, Butler resurgió en defensa y a él le acompañó un gran juego coral en ataque de Miami, en el que Dragic volvió a tener gran peso, que les llevó a ponerse 5 puntos arriba a poco menos de dos minutos del final. Brown, con dos triples, volvió a intentar despertar del letargo a Boston pero ya era demasiado tarde. Miami ya había ganado el segundo partido y ya avista a lo lejos las Finales de la NBA tras seis temporadas alejadas de ellas. De nuevo, volvió a triunfar el colectivo por encima de las muchas y grandes individualidades de Boston. Una realidad que se refleja en las estadísticas.
Hasta 6 jugadores de los Heat superaron los 10 puntos y el que se presume como gran estrella del proyecto, terminó el partido con 14 puntos y siendo el cuarto mejor de su equipo en anotación, lo que habla muy bien del equilibrio en la corta rotación y en el peso ofensivo de todos los que forman el cinco de gala. Boston volvió a depender en exceso del acierto de sus tiradores en el perímetro y la falta de alternativas, fracasó en el intento de dar importancia a la pintura con Kanter, se vio de nuevo reflejada en el partido. Pese a ello, las alternativas en el marcador y la igualdad volvieron a predominar en el duelo. Es un 0-2 pero la serie sigue más que abierta. De sábado a domingo, a las 02:30 hora española, llegará un tercer asalto que en caso de triunfo para los de Florida, las alarmas pasarían de ámbar a rojas en el seno de los Celtics.