Alcanzar los playoffs, misión ¿imposible? de Ricky en Disney
Los Suns tendrán que hacer una machada si quieren estar en las eliminatorias por el título. Marc e Ibaka, los otros dos españoles presentes en Orlando.
Phoenix Suns, casi de milagro, es uno de los 22 equipos que la NBA ha incluido en su plan para acabar la temporada en el complejo de Walt Disney World. Si nos fijamos en los récords que tenían todos ellos cuando se paró la competición, únicamente Washington Wizards (24-40) arrastraba un balance peor. Los de Arizona, con 26 victorias y 39 derrotas, eran 13º del Oeste, bastante lejos de la octava plaza que entrega el último billete para las eliminatorias. Al menos en una temporada normal, algo que ésta dejó de serlo desde que a mediados de marzo Rudy Gobert diese positivo por coronavirus y se suspendiesen todos los partidos. Hasta ahora.
Pero después de darle muchas vueltas al formato, la NBA decidió ampliar a 22 equipos, con los 16 de playoffs y seis que estaban a seis victorias o menos de los octavos puestos. Eso coló a los Wizards en el Este y a cinco equipos más del normalmente más poderoso Oeste: Blazers, Pelicans, Kings, Spurs... y Suns. El equipo de Ricky Rubio marchaba exactamente a seis victorias del octavo de su Conferencia, Memphis Grizzlies (26-39).
El 31 de julio vuelven los partidos, los estrellas de la NBA... y unos Suns que se permiten una oportunidad para soñar. Es, con diferencia, el equipo que más difícil tiene alcanzar las eliminatorias por el título de todos los que van a estar en complejo Disney de Orlando. Pero ¿tan difícil que podríamos considerarlo imposible? Está claro que Ricky Rubio y compañía van a tener que remar mucho para lograrlo y, lo que es peor, van a depender de que otra mucha gente les eche varias manos. Pero imposible desde el punto de vista matemático no es. Entonces, ¿qué opciones tienen los Suns de estar en playoffs?
Ser novenos es el objetivo
En el Oeste, Memphis Grizzlies ocupa el octavo puesto y los Suns están a 6 victorias de los de Tennessee. Con tan sólo ocho encuentros de liga regular por delante (ante Mavs dos veces, Clippers, Pacers, Wizards, Sixers, Heat y Thunder), parece ciencia ficción que les den caza. Por tanto, su mejor opción es acabar en la novena plaza que, con el nuevo formato de play in que la NBA ha aprobado para decidir la última plaza de playoff de cada conferencia, toma una nueva dimensión. Eso sí, hay una condición. Tienes que acabar a cuatro victorias de distancia como máximo del octavo para poder pelearle esa última plaza. Si lo consigues, entonces juegas a ganarle dos partidos seguidos para eliminarle y quedarte con su puesto. Si ellos te ganan uno de esos dos, te mandan para casa.
Pero recortarle la distancia a los Grizzlies no es el único problema ni el mayor con el que seguramente se encuentren los Suns. Porque para luchar con ellos por la última posición de playoffs has de quedar noveno y, en el caso de los de Phoenix, eso significa tener que adelantar a otros cuatro equipos por el camino: Portland Trail Blazers (29-37), New Orleans Pelicans (28-36), Sacramento Kings (28-36) y San Antonio Spurs (27-36). Resumiendo, que ellos necesitan estar muy bien y, además, también les hace falta que mucho estén muy mal. No suena demasiado prometedor...
Brotes verdes en Arizona
En cualquier caso, es una excelente noticia para los Suns el simple hecho de participar en este final de temporada por dos razones. Primero porque es la primera vez que van a jugar los últimos partidos de Regular Season jugándose entrar en playoffs desde 2014 y eso no puede más que aportar experiencias valiosas a un grupo de jugadores en su mayoría jóvenes e inexpertos en estas lides. Y segundo porque, aunque el récord de 26-39 no llame demasiado la atención, es la mejor marca que ha conseguido la franquicia desde que Devin Booker, su jugador estrella, llegó al equipo en 2015. Y eso que ni siquiera habían jugado los 82 partidos de liga regular.
Por tanto, algo se está haciendo bien en Arizona. Entre otras cosas ser el equipo que más asistencias da de la liga (27,2 por partido), algo que sin duda está en relación directa con la llegada de Ricky al equipo. También tienen cosas que mejorar, como los rebotes (22º de la liga), las pérdidas (21º), la defensa de los triples (23º) o los puntos de los rivales en la pintura (les meten el 49,9% de los tiros). Todo eso es cierto, igual que no lo es menos que Monty Williams, el entrenador que les ha hecho parecer un equipo por primera vez en un lustro, apenas ha podido contar al mismo tiempo con sus principales hombres. Entre lesiones y la suspensión de 25 partidos de Ayton, Williams ha tenido a toda la plantilla a su disposición en un único partido desde octubre hasta marzo. En unos cuantos de ellos faltando varias piezas clave. Y eso ahora va a cambiar. Veremos si se nota en el rendimiento en Disney World.
Marc e Ibaka, a defender el trono
Los otros dos españoles presentes en Orlando serán Marc Gasol y Serge Ibaka. Su equipo, los Toronto Raptors, llegarán a Florida en una situación bien distinta a la de los Phoenix Suns. En su caso la única preocupación que tendrán será la de que los Celtics no les recorten la ventaja de tres partidos que les separa de los de Boston y así poder enfrentarse en primera ronda a un rival más asequible. Empezar los playoffs viéndote las caras con los Nets o los Magic cambia mucho a hacerlo con Sixers, Pacers o Heat.
Esa será la motivación para los canadienses en un primer momento, mientras estén jugando los ocho partidos de liga regular. No lo tendrán fácil a pesar de la ventaja si nos fijamos en su calendario: Sixers, Celtics, Nuggets, Lakers, Bucks, Rockets, Heat y Magic. Casi nada. Una vez acabado ese tramo de competición tendrán que demostrar que son los actuales campeones de la NBA, cosa que no les convierte en favoritos este año, pero sí en un equipo al que a buen seguro cualquiera querrá evitar.