BALANCE HASTA EL PARÓN:

32-33 (8º de la Conferencia Oeste)

LÍDERES ESTADÍSTICOS:

Ja Morant: 17'6 puntos, 3'5 rebotes y 6'9 asistencias.

Jaren Jackson: 16'9 puntos, 4'7 rebotes y 1'4 asistencias.

Dillon Brooks: 15'7 puntos, 3'3 rebotes y 2 asistencias.

LO MEJOR: dando esperanza a la ciudad 

Muchos equipos claman ese puesto honorífico de la revelación. Los Grizzlies, lo sean o no, están en la pelea. Qué manera de cambiar el rumbo con sólo un par de años de tambaleos cuando otros se tiran décadas para encontrar un rayo de luz. Se acabó la época de los Allen, Marc Gasol o Conley y pronto han encontrado otra columna vertebral sobre la que erigirse como duna de las opciones de la Conferencia Oeste. Jaren Jackson como referencia exterior y Dillon Brooks como exterior de ataque y defensa ya estaban, pero el pasado verano añadieron al director de juego que percute como un puñal: Ja Morant. El cuerpo técnico que dirige el joven Taylor Jenkins tiene con lo que jugar, añadiendo otras buenas incorporaciones como Melton o Dieng, el Jonas Valanciunas que sí asusta o un Josh Jackson bien enfocado tras caer a los infiernos. Salen de un equipo con el que los aficionados se identificaban mucho y entran en otro jovencísimo que les puede durar años y les puede dar el ansiado título si lo cuidan bien, por lo que es tiempo de esperanza en Memphis.

LO PEOR: es simplemente un comienzo

No son buenos los precedentes, es verdad. El Oeste es duro desde hace ya muchos años y el equipo aguerrido que hemos visto en la última década lo dio todo pero ni con eso fue suficiente para meterse siquiera en las Finales de la Liga. Estos Grizzlies no han hecho nada todavía y, si hablamos de cotas muy altas, no tienen espejo en el que mirarse. Es cuestión de tiempo ver si ellos sí lo consiguen, pero de momento nadie puede lanzar las campanas al vuelo.

NOTA EN EL PARÓN: NOTABLE 

El mérito es el que es y no es sólo de los jugadores. La dirección deportiva ha hecho un gran trabajo, encontrando las piezas que de verdad pudieran optimizar la plantilla y no guiándose por nombres de relumbrón. Han hecho lo posible, además, con retales que habían desechado otras franquicias. Aprovechamiento al máximo y un porvenir que no pinta nada mal. Lo que les separa del sobresaliente es que la fase regular, acompañando el muro del novato de Morant, se les ha hecho larga.