Duncan Robinson: el 'tirador imposible' asombra a la NBA
Bate récords en los Heat y en los dos últimos partidos ha anotado 51 puntos con un 17/26 en triples... y ni un tiro de dos lanzado ni una visita a la línea de personal.
En los últimos dos partidos, Duncan Robinson ha producido lo que básicamente se puede considerar una anomalía estadística histórica: 51 puntos con un 17/26 en triples (9/12 y 8/14)... y nada más. Ni un tiro de dos lanzado, ni una visita a la línea de tiros libres. En la temporada, suma 233 triples convertidos, lo que ya es un récord para un jugador de Miami Heat y para un no drafteado en un solo curso. Claro que a su equipo le quedan 29 partidos. Así que en su media actual (3,7 anotados por partido), rondaría los 300, una cifra que solo se ha alcanzado cuatro veces: tres Stephen Curry (su tope es 402) y una James Harden (378 la pasada temporada).
Más anomalías: jamás ha habido un jugador que lance tanto de tres (3,7 anotados, 8,2 lanzados) por tanto poco de dos (1,2 intentos por partido) y desde la línea de personal (0,8). Duncan Robinson es, básicamente, un jugador que mete triples. Y que ha cambiado el perfil ofensivo de Miami Heat en cifras únicas en la temporada: su 44,9% es insólito entre triplistas de tanto volumen. El swingman de los de Florida es cuarto en anotados de media (3,7) por detrás de James Harden (4,5), Damian Lillard (3,9) y Buddy Hield (3,8). Pero estos tres están en porcentajes de, respectivamente, 35,4%, 39,6% y 39,1%. El caso más parecido a Robinson es el de Davis Bertans (ambos participaron en el último concurso de triples, que ganó Hield): 3,6 anotados con un 42,2%. Y también está claramente por detrás de Robinson en producción y efectividad.
Robinson ha sido titular ya en 58 de su segunda temporada NBA, donde su irrupción ha sido imprevista para todos... menos para Erik Spoelstra (una vez más). Después de no ser drafteado en 2018, firmó con los Heat un contrato two-way tras un tremendo 63% en triples en la Summer League. Solo jugó 15 partidos NBA (su primera canasta fue, claro, un triple) y se quedó (con largos tramos en la G League con Sioux Falls Skyforce) en un 28,6% desde la línea de tres. Después, 33,9% en la última Summer League y 28,2% en la pretemporada de los Heat. y de ahí, a esta Supernova de la Regular Season, donde se ha convertido en una pieza clave de un equipo con Jimmy Butler como eje y al que también impulsan desde el frente joven el impresionante Bam Adebayo (ya All Star) y los rookies Kendrick Nunn y el reputado cañonero Tyler Herro, que por ahora mete 2,2 triples por partido con un 39,3%. También (fue número 13 del último draft y considerado intocable por los Heat en cualquier negociación para incorporar a estrellas) hasta ahora notablemente por detrás de Robinson.
El camino de Robinson a la NBA, y a ser uno de los más letales tiradores de una liga llena de especialistas, ha sido improbable. Su estreno universitario fue en la Division III, donde fue campeón y Rookie del Año con Williams College antes de ser transferido a Michigan, donde ya destacó como tirador a nivel nacional: mejor triplista (45%) y Mejor Sexto Hombre de la Big Ten en 2018, año en el que los Wolverines pelearon el título a Villanova (y perdieron) en San Antonio. Para muchos, ahí parecía acabar un camino bajo los grandes focos que sin embargo no había hecho más que empezar para un alero de 2,01 que tiene 25 años (cumplirá 26 en abril) y un contrato excelente para su equipo: 1,4 millones de dólares esta temporada, que arrancó con solo un millón garantizado, y team option de 1,6 para la próxima. Casi de la nada, otro guerrero para Erik Spoestra.