Los Blazers no perdonan a los árbitros: "Se tragaron sus pitos"
Las reacciones al error arbitral dentro y fuera del vestuario del equipo de Portland no se han hecho esperar. "Nos ha costado un jodido partido".
La derrota de los Blazers a causa de un error arbitral clamoroso no ha dejado indiferente a casi nadie en el mundillo de la NBA. Especialmente entre los integrantes de la comitiva de Portland, los grandes perjudicados por la decisión de no pitar el clarísimo tapón ilegal de Gobert a Lillard a 11 segundos del final del encuentro. Terry Sttots, entrenador de los Blazers, trató de no pasarse de la ralla pero no pudo evitar dejar una de las frases de la noche: "Es una pena que se haya decidido por una jugada mal pitada, no hay otra manera de explicarlo. Podrían haber pitado y tapón ilegal y haber ido a revisarla, pero se tragaron sus pitos en una jugada que era bastante obvia. Es muy decepcionante que el gran esfuerzo que hemos hecho haya acabado con una decisión así".
Los jugadores no fueron tan políticamente correctos, especialmente las dos estrellas del equipo. C.J. McCollum directamente pedía consecuencias en forma de sanción: "Me hace pensar que no eres capaz de hacer tu trabajo de la forma en que deberías hacerlo, lo que significa que deberías ser reprendido, deberías ser multado. Cuando nosotros nos equivocamos, nos multan". También Damian Lillard habló del tema y fue quien más dijo: "Estábamos en le partido hasta el final y no han pitado una jugada clara. Y nos dicen que claramente no había nada que pitar. Nos ha costado un jodido partido. Estamos en la carrera por los playoffs y una mala decisión nos ha costado el partido".
Los árbitros, que según los jugadores de los Blazers les dijeron en directo que no había sido tapón ilegal "ni de lejos", rectificaron después en palabras de uno de ellos, Josh Tiven: "Hemos visto la repetición después del partido y desafortunadamente nos hemos dado cuenta de nuestro error. El tapón ilegal debería haber sido señalado". Antes de eso Lillard ya comentó que no quería ver ni una sola declaración oficial diciendo que su canasta tendría que haber subido al marcador. Y, claro, al ver las palabras del árbitro no se pudo contener.
"Ahora querrán que salgamos aquí y no digamos nada, a pesar de que necesitamos todas las victorias posibles en nuestra lucha por los playoffs. Nos ha costado el partido y por supuesto que tenemos algo que decir al respecto", sentenciaba el base.