Los Nets y Kyrie, vapuleados por el ritmo supersónico de los Bucks
Tres derrotas en cuatro partidos desde el regreso de Kyrie para unos Nets que ya están octavos del Este. Los Bucks, en proyección de superar las 70 victorias. Imparables.
Ahora mismo, a los Bucks les da igual qué rival esté delante. Pero al resto, a la liga, no: esta vez fueron los Nets los atropellados (97-117... y gracias) por el expreso de Wisconsin, un tren de alta velocidad que ni vio rival en el equipo de un Kyrie Irving que de un tiempo a esta parte, y por desgracia porque su talento es extraordinario, da más titulares fuera de las canchas que en ellas. Mientras se mete él solo en líos sobre qué es y qué no es un líder y cómo hay que gestionar o dejar de gestionar un vestuario (una cantinela que le tocó en Cleveland, le abrasó en Boston y ya es tema en Brooklyn), su equipo solo ha ganado un partido desde su regreso, 1-3 total con tres derrotas seguidas en los tres partidos jugados contra equipos por encima del 50% de victorias. Y ahora llegan Sixers y Lakers como próximos rivales de unos Nets que están 18-23, otra vez octavos del Este. Pese a las lesiones y pese a que es un año raro en eterna espera de Kevin Durant (un año de transición), mal. Muy mal. Y con Kyrie señalado: esta vez 17 puntos con un 6/15 en tiros y, eso sí, peores minutos (mucho peores) de su equipo sin él en pista.
Sin rastro de ese total que era mucho más que la suma de las partes, de todo lo que había edificado Kenny Atkinson, sin Joe Harris ni DeAndre Jordan y con muy malos partidos de Dinwiddie y LeVert (6/25 entre los dos, 17 puntos), los Nets fueron una mediocridad zarandeada por los intratables Bucks. Construir un aspirante siempre es difícil, un paso complicado por muy bien que se haya hecho todo antes aunque los Nets, eso que llevan, tal vez lo tengan tan fácil como soltar a Durant cuando comience la próxima temporada. A veces las cosas son así de sencillas... pero otras no.
Los Bucks se pasearon en el segundo tiempo después de aplacar poco a poco la resistencia de los Nets en el primero (71-93 al final del primer cuarto). Lanzaron bien (17 triples) y dejaron a su rival en un 33% que garantizaba que acabarían cayendo por su propio peso. LLevan otra vez seis victorias seguidas y 38 en 44 partidos (38-6). En ritmo de ser el tercer equipo de la historia por encima de 70 triunfos junto a los Warriors del 73-9 y los Bulls del 72-10, que pasaron por esos primeros 44 en, respectivamente, 40-4 y 41-3 (junto antes de perder dos seguidos, algo que no repitieron, y verse 41-5). Su diferencia media de puntos (+12,6) va camino de récord absoluto, y Giannis Antetokounmpo ni siquiera tiene que esforzarse al máximo muchas noches. Esta vez igualó su tope de pérdidas (8) pero acabó en 25 minutos con 29 puntos y 12 rebotes. Khris Middleton sumó 20 puntos, Brook Lopez 7, DiVincenzo 11... los Bucks marchan a toda velocidad y arrollaron a unos Nets que son un amasijo de preguntas que, por ahora, solo tienen una respuesta: Kevin Durant. Pero si tener al alero es un obvio alivio, su situación general es más allá de eso preocupante. Y su marcha hasta ahora en esta temporada, muy decepcionante.