Tacko Fall, dos mates y la ovación del Madison en su debut NBA
Stevens da minutos al senegalés de 2,26 para rematar una gran segunda parte de los Celtics. En los Knicks, abucheos del público a Dennis Smith.
Los Celtics han basado esta temporada en hacer borrón y cuenta nueva. Olvidar la pasada, en la que partían como un aspirante al anillo que se acabó quedando muy (muy) corto con una evidente falta de química en un vestuario atribulado por las idas y venidas (espirituales) de Kyrie Irving... y su ida (material) definitiva. Ahora los verdes tienen, a priori, más bajo el techo pero parecen decididos a demostrar aquello, tan cierto en el deporte, de que el total es a veces mucho más que la suma de las partes. Con Kemba Walker, jugadores que pueden romper definitivamente (Jaylen Brown, Jayson Tatum...) y con la sangre fresca adquirida en el draft. De Carsen Edwards y Grant Williams a Tacko Fall, el 2,26 que no fue seleccionado pero que se ha ido ganando primero la oportunidad y después el contrato en Boston.
En el Madison, nada menos, el senegalés de 23 años debutó oficialmente con la camiseta de los Celtics (nada menos) en los minutos finales de un choque en el que los Knicks habían abandonado ya toda resistencia (95-118 final). Tacko jugó menos de cinco minutos y le pitaron dos faltas... pero dejó dos mates de esos que él ejecuta casi sin saltar y que se llevaron una ovación atronadora del público. En uno de los templos del baloncesto, la tackomanía endulzó el final feo de un partido que selló el 0-3 de un equipo que cayó en picado en una segunda parte que David FIzdale definió como "bochornosa" y en la que se pasó del 51-46 al descanso a un 85-109 ya definitivo. Kemba Walker, de menos a más de forma escandalosa en los tres partidos con su nuevo equipo (2-1), solo falló un tiro de 9 intentados en esa segunda mitad y metió tres canastas seguidas para sellar la brecha definitiva. Acabó, cerca de su casa (se crió en el Bronx) con 32 puntos y un 7/12 en triples. Y los Celtics, que han metido 115 puntos de media en dos partidos tras sufrir mucho contra la defensa bestial de los Sixers en su estreno, acabaron con excelentes sensaciones pese a jugar sin Kanter ni Theis y en el segundo buen partido seguido de Jaylen Brown (19 puntos, 4 rebotes). Y del rookie Grant Williams, un interior de 1,98 (28 centímetros menos que Tacko) con el que Brad Stevens quiere pulir un defensor al estilo Draymond Green. Con los mates finales de Fall como feliz postal, pero poco más, los Celtics se dieron un gustazo en el Madison y ya sonríen tras un mal primer partido.
En los Knicks sigue dejando muy buenas sensaciones RJ Barrett (26 puntos y 7 rebotes con un 4/6 en triples), con la planta de jugador franquicia que no enseña casi nunca Kevin Knox (7 puntos esta vez), que tiene todavía 20 años (por los 19 de Barrett). Mitchell Robinson no falló en las zonas (3 tapones y 7/7 en tiros para 17 puntos) pero a Fizdale le está creciendo un problema en uno de los puntos clave de la reconstrucción en la que está metido: la dirección. Dennis Smith Jr, que llegó de Dallas en el trade de Porzingis, está sumido en un agujero negro tras una pretemporada marcada con los problemas físicos y después de tres partidos en los que lleva 3 puntos totales y un 1/11 en tiros con solo tres asistencias. Esta vez ningún punto, tres tiros fallados y dos pérdidas por una asistencia en 11 minutos con (ojo) abucheos de un Garden que cantó "We want Frank" en referencia al francés Frank Ntilikina, que jugó menos de un minuto. Problemas que asoman pese al excelente inicio de Barrett y aireados esta vez por unos Celtics muy superiores, que jugaron una gran segunda parte y que dejaron que los dos primeros mates en la NBA del gigante Tacko Fall fueran en el Madison Square Garden. Que no es poca cosa.