"Mi verano ha sido mejor que el de Batum" afirmaba Willy entre risas. El pívot español habló ante los medios a poco más de dos semanas del inicio de una nueva temporada en la NBA. Será el tercer año del mayor de los Hernangómez en la mejor Liga del mundo, una aventura que inició con los Knicks y que ahora continúa en los Hornets, esta vez con el oro mundialista colgado del cuello.

La victoria en el Mundial de China ha supuesto todo un logro para Willy y su experiencia con la Selección y en especial con su compañero Marc Gasol han sido claves para él. “Ha sido una gran oportunidad para aprender de Marc. Siento que todos los días estaba en la escuela, aprendiendo algo nuevo, defensa, ofensiva, los pequeños detalles, no solo en la cancha de baloncesto sino también fuera de la cancha de baloncesto. La forma en que Marc nos cuidó a mí y a mi hermano y nos dio consejos, no solo para la Copa del Mundo sino también para la temporada fue una experiencia increíble.Espero poder usar esos consejos aquí en Charlotte”.

El jugador ha reconocido que ha estado trabajando en verano y que llega con la misma mentalidad que el año pasado. "Quiero pelear por minutos porque creo que es un año muy importante para mí. Somos jóvenes, pero quiero usar este campo de entrenamiento para trabajar y mostrarles que he estado trabajando muy duro y estoy listo para llevarlo al siguiente nivel", ha afirmado. 

Willy, que también ha hablado de lo que aportará Terry Rozier al grupo y de su trabajo con Cody Zeller, disputó 58 partidos la temporada pasada, 3 de ellos como titular, promediando 7 puntos y 5 rebotes por partido en 14 minutos de juego. El mayor de los Hernangómez ha debutado en la pretemporada de los Hornets ante los Celtics, partido que su equipo ha perdido por la mínima (107-106) y en el que ha anotado 2 puntos y ha atrapado 4 rebotes. En la pasada madrugada jugaron también los Grizzlies, que vencieron al Maccabi y los Clippers que hicieron lo propio con los Sharks.