La policía de Mobile (Alabama) ha emitido una orden de arresto sobre DeMarcus Cousins por un delito menor de violencia doméstica, según informó este jueves el cuerpo de seguridad de la ciudad del estado sureño. El pívot de Los Angeles Lakers se enfrenta a un año de cárcel si es declarado culpable (o se declara culpable) de acoso en tercer grado sobre su expareja, Christy West.

La denuncia fue puesta por la misma West, que presentó a la policía una supuesta grabación donde su excompañero la amenazaba de muerte. También existiría un audio con un contenido similar, realizado mientras ambos se encontraban en un local de camas elásticas junto a su hijo de siete años. TMZ, medio que tuvo acceso a la grabación, asegura que la voz que se oye es la Cousins.

"Voy a preguntarte esto una vez más antes de llevarlo a otro nivel... ¿Puedo tener a mi hijo aquí, por favor?", pregunta el center en este supuesto audio. "No", responde su expareja. "Me aseguraré de poner una bala en tu puta cabeza". West alega, además, que Cousins la habría estrangulado en un incidente anterior. La negativa de Christy a que el hijo de ambos asistiera a la boda del pívot con Morgan Lang en Atlanta el pasado 24 de agosto estaría detrás de estas amenazas.

La denuncia es otro punto negro sobre la imagen de Cousins, que no encuentra la manera de salir del fango. A su fama de rebelde e indisciplinado, se le une sus graves y recurrentes problemas con el físico: en un año y medio se ha lesionado el cuádriceps, el Aquiles y el cruzado. Este último se lo rompió el pasado 15 de agosto durante un entrenamiento con los Lakers.