Andre Iguodala: un MVP que se marcha por la puerta de atrás
El escolta, que fue designado mejor jugador de la Finales de 2015, ha sido traspasado a los Grizzlies por rondas del draft para hacer hueco a Russell.
La NBA es una liga en el que el futuro pesa mucho más que la historia que haya podido escribir un jugador. El ritmo propio de la competición obliga a los general managers a lanzarse a por la mejor opción disponible y no les suelen doler prendas si tienen que sacrificar a un jugador ilustre. Algo parecido debió pasar por la mente de Andre Iguodala cuando Bob Meyers, el máximo mandatario deportivo de los Warriors, le comunicó que saldría traspasado rumbo a Memphis Grizzlies, para hacerle hueco a D´Angello Rusell en la franquicia californiana.
Las salidas de Kevin Durant y de DeMarcus Cousins a la agencia libre para buscar un nuevo postor, además de la grave lesión de rodilla de Thompson, que le tendrán alejado de las pistas buen parte de la temporada, han obligado a Meyers a hilar muy fino. Su apuesta, para intentar lograr que los Warriors no desciendan de la zona noble de la liga, ha sido la contratación de D'Angello Russell por cuatro temporadas y un sueldo máximo de 117 millones de dólares. Incorpora a la disciplina californiana un jugador joven, con movilidad, rango de tiro, mucho talento en el uno para uno y que viene de completar su mejor año como profesional (21,1 puntos, 7 asistencias y billete para el All Star). No obstante, como toda acción tiene una repercusión, en este efecto dominó, la ficha eliminada del tablero ha sido la de Andre Iguodala.
Iguodala aterrizó en Golden State en el curso 13/14, en un traspaso a tres bandas, y aunque ya no era el escolta de físico exuberante que deslumbró en Filadefia, estaba más que capacitado para imprimir intensidad y defensa a una plantilla que era incapaz de superar las semifinales de conferencia. Siempre titular con Mark Jackson (66 de 66 partidos arrancando desde el principio), su situación cambia drásticamente con la contratación de Steve Kerr en la campaña siguiente. El nuevo técnico lo relega al banquillo y le confiere el rol de sexto hombre con la misión de cambiar los encuentros desde la defensa. Forma parte del llamado 'Quinteto de la muerte' (Curry, Thompson, Barnes, Iguodala y Green) y de su evolución posterior, con la inclusión de Durant por Harrison Barnes.
Su momento cumbre acaece ese misma temporada cuando, en las Finales del 2015, logra amordazar a LeBron James en defensa sin dejar de ser efectivo en ataque (media de 16,3 tantos y 40% desde el triple). Su actuación cambió el devenir de la eliminatoria y le valió para ser galardonado con el MVP. Luego llegaría la temporada de las 73 victorias y dos anillos más, al tiempo que su rendimiento iba decreciendo en temporada regular. De hecho, este año ha registrado sus peores números como profesional (5,7 puntos). En playoffs, en cambio, seguía ofreciendo un nivel notable, pero estando cada vez más restringido al rol de especialista como, por ejemplo, en estas últimas Finales ante los Raptors, donde ha tenido que cubrir las bajas de Durant y Thompson con cierto éxito.
Sin embargo, su impecable trayectoria no ha sido suficiente para guardar su puesto en los Warriors. Desde ayer es integrante de los Memphis Grizzlies, con los que se especula que puede rescindir el contrato para recalar en Lakers o Rockets, a cambio de una primera ronda protegida en 2024. La juventud ha podido con la veteranía y los intangibles del alero de Springfield. Iguodala se marcha por la puerta de atrás.