Los problemas se acumulan para los Portland Trail Blazers. A la situación límite que tienen en lo serie, con un 3-0 en contra que les deja al borde de la eliminación, se le une la lesión de su gran estrella, Damian Lillard. El base sufre una dolencia en las costillas de la parte izquierda. En concreto se trata de una separación entre dos de ellas que le produce dolor continuo y le incomodan en el normal desarrollo de su actividad durante los partidos.

La lesión se produjo en el tercer cuarto del segundo partido, en una jugada dividida en el centro del campo. Lillard peleó por un balón con Kevon Looney. El de los Warriors lo ganó, pero cayó encima del jugador de los Blazers, al que aplastó contra el suelo en la zona de las costillas. La noticia no la han hecho oficial ni la franquicia de Oregón ni el propio jugador. Ha sido Sams Charania, periodista de The Athletic, quien la ha filtrado a través de fuentes de la Liga que se lo han confirmado. 

Lillard no ha hablado de la lesión, ni siquiera en la entrevista después del partido de anoche, en el que no estuvo especialmente acertado (5/18 en tiros). Sí se refirió al cansancio que está notando a estas alturas de playoffs, pero sin querer ponerlo como excusa: "Todo el mundo está cansado. Es la tercera serie de playoffs después de una temporada larga. En nuestra última eliminatoria tuve mucha atención sobre mí y lo mismo está pasando en ésta. Cuesta mucho librarse de eso y luego bajar a defender al máximo nivel. Pero todo el mundo está haciendo el mismo esfuerzo. Me siento bien para salir ahí y jugar 40 minutos, pero claro que es cansado".

Los porcentajes de Lillard hasta la acción en la que se lesionó eran de 36,8% (7/19). Desde entonces ha firmado un 29,6% (8/27).