NBA | GRIZZLIES 92 - NUGGETS 95
Los Grizzlies tiran a la basura 25 puntos de ventaja y muestran de nuevo que están de capa caída
Marc Gasol y Mike Conley pudieron jugar su último partido en Memphis, un partido que se les escapó de la peor forma: iban ganando por 25.
Memphis Grizzlies es un equipo carcomido. La razón no se entiende muy bien, ya que el proyecto está en plena reconstrucción pero hay una clara mejora tanto de prestaciones como de herramientas de la pasada temporada a ésta. Pero ahora sí que parece el final. Marc Gasol y Mike Conley han entrado de lleno en las conversaciones de traspaso, su racha es horrenda en el último mes y se permiten el lujo de perder partidos como el de hoy ante los Nuggets.
Ganaban por 25 puntos (70-45, minuto 31), pero ni así. Tiraron por el sumidero tal ventaja por puro pasotismo, tenían el partido realmente controlado y estaban desquiciando a los Nuggets, a los que el encuentro les vino caído del cielo.
Conley hizo un partidazo. No sólo por los 23 puntos y 11 asistencias que acreditó, que es lo que se ve a simple vista: su dominio de las situaciones en ataque, sobre todo en estático, fue total hasta que llegó la remontada de Denver, volvió loco a Harris, Barton y Morris. El equipo de Mike Malone sólo salía de la cueva de vez en cuando para lanzar alguna contra provechosa, pero poco más. La primera parte también sirvió para ver buenos cortes por el centro de Noah, acierto en varias posiciones de Holiday y acciones defensivas de Jackson. Y Marc Gasol, mucho Marc Gasol: el español terminó con 28 puntos y 9 rebotes, con un gran trabajo yendo de fuera hacia dentro y distribuyendo balones.
A los Grizzlies se les vio fritos en el último cuarto. Jugaron con ocho en la rotación, el noveno (ivan Rabb) sólo disputó cinco minutos, y el parcial en el periodo definitivo fue 15-35. Los Nuggets rompieron a base de contragolpes y transiciones rápidas, aunque fue con dos triples, uno de Beasley y otro de Barton, con lo que llegaron a culminar y ponerse por delante. Justin Holiday ponía otro tiro de tres dentro (92-91) y Jokic anotaba a falta de medio minuto un tiro ante Marc Gasol (92-93), pero lo peor estaba por llegar: una acción de Kyle Anderson en la que fintó dos veces para fallar, cogió el rebote ofensivo en cinco metros y dudó dos veces para lanzar sin tocar apenas aro y lanzar de nuevo a la vez que estaba pisando la línea de fondo, un despropósito que llevó a que los de Colorado a vencer por 92-95.
Los Grizzlies inician ahora una gira fuera de su pabellón. El 6 de febrero vuelven, justo un día antes del cierre del mercado de traspasos en el que Marc Gasol podría estar involucrado. Si éste es el final, es horrendo.