LeBron (32+14+7) se da un homenaje en su regreso a casa

Qué diferente es volver a casa habiendo dejado el trabajo hecho o no. En 2010, cuando llegó a Cleveland con Miami después de siete años jugando para los Cavs, el recibimiento fue uno de los peores que se recuerda a un jugador en la historia de la NBA. Gritos, abucheos, insultos, pancartas de todo tipo... Anoche, después de ganar el anillo en 2016, el Quicken Loans Arena sí que parecía el hogar de LeBron James. Todo el mundo quería verle, todo el mundo quería tocarle, todos querían abrazarle, darle la bienvenida y agradecerle todo lo que les había dado durante tantos años. Empezando por la propia franquicia, que le dedicó un vídeo homenaje antes del inicio del partido.

¿Y cómo respondió LeBron a todo este cariño? Haciendo lo que mejor sabe, jugar al baloncesto. Y lo hizo como sólo él sabe hacerlo en Cleveland. Como jugador local no hay discusión, ha sido el mejor en ese pabellón. Pero es que como visitante también. Ningún rival de los Cavs mete tantos puntos en su casa como él. 31,5 promedia en los siete partidos que ha jugado allí con otra camiseta. Anoche fueron 32, con 14 rebotes y 7 asistencias. 

Pero LeBron no fue el único que quiso brindar un buen espectáculo a los espectadores. Como contagiados del buen ambiente que rodeo al encuentro, los Cleveland Cavaliers jugaron uno de los mejores baloncestos que se les ha visto en la temporada. De repente parecieron un equipo serio y tuvieron opciones reales de ganar. Recordemos que sólo lo han hecho en dos de los dieciséis partidos que han disputado hasta ahora (es el peor equipo de la liga).

La estadística que mejor refleja el buen hacer de los Cavs anoche es la de las pérdidas. Sólo regalaron tres balones y nunca habían perdido un partido con tan pocas pérdidas en toda su historia. De hecho, en la primera mitad no cometieron ninguna, algo que no había hecho ningún equipo en toda la temporada. Eso se tradujo en igualdad, aunque siempre con un punto por encima de los locales. Desgraciadamente para ellos la segunda parte se les hizo larga, la perdieron de siete puntos, a la postre definitivos. 

El partido realmente no se les fue hasta el último minuto, donde una jugada ha provocado algo de polémica. A falta de 22 segundos y con los Lakers dos arriba LeBron lanza desde un lateral, el balón dio en el aro y el rebote lo pelearon Lonzo, Ingram y Osman. Sin que nadie se hiciese con la posesión, el turco fue el último en tocar el balón antes de irse fuera. Los árbitros, en lugar de dar una posesión de 14 segundos a los Lakers, como indica la nueva norma del rebote ofensivo, aplicaron la de toda la vida y le dieron la posesión completa de 24 segundos. No está muy claro aún si actuaron correctamente y la discusión está abierta en Estados Unidos, pero lo que está claro es que los Cavs se vieron obligado a hacer falta. LeBron metió uno de los dos y en el siguiente ataque los locales no supieron empatar el partido.

En los Lakers, gran actuación de todos los titulares, con mención especial a JaVale McGee (12+5+2 y 3 tapones, uno de ellos clave en el tramo final). En los Cavs Cedi Osman fue el máximo anotador (21+7+2).