Poco dura la alegría en la casa del pobre. Un refrán que pueden aplicarse perfectamente en Phoenix, que pasado el hype del draft, su número uno con DeAndre Ayton y su grupo de jóvenes encabezado por Devin Booker, lo que había debajo de todo eso era un equipo por hacer. Aún están en ello y les va a llevar bastante tiempo. La victoria ante los Grizzlies fue un espejismo en una temporada en la que no es que estén defraudando por resultados, porque pocos esperaban que fuesen a ganar muchos partidos. Pero sí por las sensaciones que dejan en la cancha: tienen el pero rating ofensivo de la liga y el quinto peor defensivo.

Booker fue el máximo anotador, pero estuvo muy desacertado en el tiro. 6/21 en tiros y 2/8 en triples para 20 puntos, a los que añadió 8 rebotes. DeAndre Ayotn aportó un nuevo doble-doble con 15 puntos y 13 rebotes. En el otro lado, un equipo que tampoco aspiraba a grandes cosas al empezar el año y que poco a poco y sin hacer mucho ruido está sumando victorias. Son 5 ya, por 6 derrotas. Están séptimos en el Este y con la caída segura de Cleveland y suponiendo que los Wizards no remonten la situación (que es mucho suponer a estas alturas) no sería para nada descartable que se encontrasen con unos playoffs totalmente inesperados.

Ahora mismo tienen por detrás a Miami y Detroit, dos equipos que siguen siendo más favoritos que ellos. Pero habrá que estar atentos a la evolución de los de Brooklyn. De momento Caris LeVert sigue siendo la mejor noticia de su temporada. Anoche fue otra vez el mejor con 26 puntos y 5 rebotes. D'Angelo Russell (15+6+3+2) y Jarret Allen (10+9+5) también rindieron a buen nivel.