“No soy un sexto hombre y no voy a serlo en el futuro. Quiero que todo el mundo lo tenga claro. Soy dos veces all star y he hecho cosas cuando he tenido la oportunidad que no muchos han hecho en la NBA. Pero fui traspasado en una situación concreta sobre la que no tengo ningún control. No es nada contra los Lakers ni contra Luke Walton. Voy a aprovechar la oportunidad que me están dando y vamos a acabar fuertes la temporada”. Habla (para USA Today) Isaiah Thomas, que hace un año estaba en las conversaciones para el MVP y dirigía a unos Celtics con los que vivía en un idilio constantes. Desde entonces ha tenido que pasar por el fallecimiento de su hermana, su lesión de cadera y dos traspasos con un paso terriblemente fallido por los Cavaliers de LeBron.

Ahora en los Lakers trata de revalorizarse otra vez. Lo que estaba destinado a ser un contratazo seguro, está ahora seriamente comprometido: la lesión no pudo llegar en peor momento para él, que será agente libre al final de esta temporada. Y las cosas, sin llegar a su nivel de los Celtics, van mejor para él: promedia 18,4 puntos y 5,8 asistencias desde el 23 de febrero y aunque no ha sido titular, su lugar en la rotación ha sido importante ya que además los Lakers están jugando con las bajas de jugadores como Brandon Ingram y Josh Hart.

La relación entre Isaiah y Walton comenzó a encauzarse con una charla nada más concretarse el traspaso y cuando ya volaban los rumores de que Thomas no quería salir desde el banquillo en su nuevo equipo: “Le dije a Luke que evidentemente quería ser titular y que creía que me había ganado la consideración de titular en cualquier equipo de la NBA. Pero también le dije que no iba a causar problemas si era suplente”.

Luke Walton ha aplaudido la actitud de un jugador que tendrá que ver qué oportunidades surgen en la próxima agencia libre: “Al final, veré quién me quiere, donde tienen más ganas de contar conmigo. Donde podré ser Isaiah Thomas. Trataré de tomar la mejor decisión para mí y mi familia, eso es lo único que me va a preocupar. Cada vez me siento mejor, me muevo mejor, mi cuerpo responde mejor. Todavía me llevará tiempo volver a mi mejor nivel pero las cosas no son como en Boston, no voy a meter siempre 30 puntos por partido en cualquier sitio. Pero cuando llegue la oportunidad, y llegará, estaré preparado y volverá por mis fueros”.