Buenas noticias para Brandon Jennings, uno de esos talentos precoces cuya carrera ha sido (hasta ahora) una tremenda decepción. El base (número 10 del draft de 2009), en la G-League (Wisconsin Herd) tras pasar por China, volverá a la NBA con 28 años y al equipo que le drafteó, Milwaukee Bucks. Después jugó en Pistons, Magic,Knicks y Wizards. Jennings firma un contrato de diez días para ocupar un hueco en el roster que deja libre, y esa es la parte mala (pésima) de la noticia, el bosnio Mirza Teletovic.

Los Bucks han cortado a Teletovic, que cobra 10,5 millones este año y tiene la misma cantidad garantizada para la próxima temporada, por “cuestiones médicas” y después de la embolia que se le detectó en diciembre en los dos pulmones y que reproducía un problema que ya había sufrido en la temporada 2014-15, en Brooklyn Nets. “La salud de nuestros jugadores es nuestra principal preocupación. Franquicia y jugador, después de consultar con los doctores del equipo y otros expertos, y de haber estudiado la situación desde diciembre, hemos decidido que es el momento de tomar esta decisión”, aseguró en un comunicado el general manager de la franquicia, John Horst.

Se trata, lo recuerda hoy la prensa de Wisconsin, de un caso similar al de Chris Bosh, que no ha anunciado oficialmente la retirada pero que no ha jugado desde el 9 de febrero de 2016 por los coágulos de sangre que aparecieron en sus pulmones y piernas. El riesgo extremo incluso para su vida ha impedido que los médicos hayan facilitado su regreso a las pistas después de que los Heat terminaran su relación con él el pasado verano.

Teletovic, por su parte, sufrió la primera embolia en enero de 2015. Anunciada su ausencia para la toda la temporada, pudo regresar para jugar tres partidos en primera ronda de playoffs (los Nets cayeron 4-2 ante los Hawks). En noviembre, Teletovic afrontaba una baja de unas cuatro semanas por una intervención en la rodilla izquierda pero, tras someterse a pruebas por unos síntomas que incluían una fatiga excesiva, se descubrió que sufría una embolia en los dos pulmones.

Hace apenas unos días, el propio Teletovic (32 años, campeón de dos Ligas y una Copa con el Baskonia entre 2006 y 2012) negó en las redes sociales que estuviera a punto de anunciar su retirada, aunque ahora se enfrenta a un futuro incierto. Según el último convenio de la NBA, la decisión sobre si una lesión implica un riesgo demasiado alto para jugar, y por lo tanto obliga a la retirada, la tiene que tomar un médico seleccionado por la franquicia implicada y el sindicato de jugadores (NBPA). Si las pruebas demuestran que el jugador no es “medicamente apto”, el equipo (los Bucks, en este) pueden sacar de sus libros de cuentas su salario (a efectos de salary cap), que en todo está plenamente garantizado para el jugador. En el caso de Bosh, el factor que supuso la recaída fue determinante para que se estableciera que existía riesgo incluso para su vida si trataba de seguir jugando. A partir de ahí, ni Miami Heat ni ningún equipo ha asumido el riesgo, aunque Bosh trató por todos los medios de sostener su carrera e incluso hace unos días aseguró que seguía en forma por si acaso.

En el caso de Teletovic también se han producido dos casos (2015 y 2017), lo que puede complicar su situación de cara a volver a las pistas. Aunque por ahora, es una obviedad, la prioridad es su salud y que se recupere con plenas garantías. Y si puede ser para seguir jugando al baloncesto, mucho mejor.