El Madrid llega al Palau con cinco triunfos de ventaja

Será el quinto Barça-Madrid del curso (2-2) y el tercero en las últimas tres semanas. La final de Copa que ganaron los de Pesic (90-92), la revancha blanca en el Palau cinco días después en la Euroliga (74-101) y el de este domingo en la Liga Endesa, también en pista azulgrana. Si en el duelo europeo el Madrid se jugaba más ante un rival casi eliminado, ahora es el Barcelona el que llega exigido por la clasificación. Los de Laso son líderes destacadísimos, tanto que desde que se juega con el actual sistema (1995) nunca a estas alturas el primero había aventajado en cinco victorias al segundo, en este caso a tres equipos: Barça, Valencia y Baskonia.

La renta blanca es muy amplia, pero Laso no piensa en dar descansos ni en “despreciar ningún partido”, por mucho que el martes se la juegue en Milán ante el Armani, en otro duelo clave por el factor cancha en el playoff de la Euroliga.

Doncic no ha viajado (ayer estaba en Fuenlabrada viendo a su amigo ­Rupnik en el otro derbi) y Randle ayudará en la dirección a Campazzo, que ahora es el único base puro. Imprescindible. Sí ha viajado ­Thompkins, pese a no estar inscrito en la ACB (Ayón y Randle son los extracomunitarios), porque el Madrid volará directo desde la Ciudad Condal a Milán. En el Barça, Pesic confirma las bajas de Hanga, Sanders y Seraphin. Hay ausencias y hay rivalidad. La clásica.